El mundo del Circo se ha visto muy afectado por el parón provocado por la pandemia. Baste el ejemplo del Circo Holiday. A ellos el estado de alarma les pilló en un pueblo de la Rioja, y la caravana tuvo que quedarse allí, confinada. Las primeras semanas ellos mantenían su actividad de entrenamiento. Pero los gastos se mantenían y los ingresos se habían detenido. Cuando pudieron, todos los artistas que estaban en condiciones para trabajar, se ofrecieron a los agricultores de la zona, y por las mañanas eran brazos para las viñas y a las tardes para las mazas, los aros o el trapecio. 

Hacía unos meses que el Circo Holiday había apostado por tener en su pista a alguien que ha hecho reír a generaciones. Alguien que procede de una de las familias más conocidas del Circo en España, la familia Aragón.  D. Alfonso Aragón Sac,  aunque todo el mundo le llama Fofito. 

Fofito trabaja ahora en el Holiday junto a Mónica, su hija, que lleva también en las venas el amor por la pista. Alfonso Aragón lleva siempre en cartera dos espectáculos, el que hace con Mónica y otro que hace él solo cuando su hija tiene otros compromisos.  Fofito se siente como un miembro más de la gran familia del Holiday, así se lo hace sentir la familia Sacristán cuando le sientan a su mesa. 

Justo Sacristán, director del Holiday, reconoce  que la edad y el paso de los años también es evidente en la persona de Alfonso Aragón, pero que es ponerse el bombín, el sayón y los zapatones, maquillarse un poco y salir a pista y ….se produce la magia o el milagro, Fofito triunfa en la pista como siempre lo hizo. ¿dónde está el truco?

Mira, yo suelo estar en el control de pista uno o dos números antes por si pasa algo y hay que salir. Y Justo me ve que estoy tranquilo, reposado. Es oír que nos anuncian en pista y me pongo en pie con la conciencia de que la responsabilidad de Mónica y Fofito es divertir al público. Esa es la motivación que siempre he tenido: divertir al público. 

¿Fofito cómo sobrevive el Circo en esta sociedad?

El Circo ha tenido que adaptarse a las nuevas exigencias, la prohibición de animales en el Circo no nos permite ni sacar un perrito para hacer una gracia con él. Entonces hemos tenido que potenciar más a los malabaristas, acróbatas, funambulistas, y los payasos, un circo sin payasos es como un huevo sin sal. Nos hemos modernizado. 

¿los niños de hoy son  como los niños de ayer? ¿Has podido ver los cambios generacionales a través del público?

No los niños de hoy no son como los de ayer. Las nuevas tecnologías les influye mucho. Son más vivos. Hoy Fofito tiene que ser más hábil para esconder el final de la parodia o el final del chiste para que no te lo pillen, porque las pillan al vuelo. “¡cuidao que se te va a caer el cubo de agua!... que te van a dar con la tarta!!!!” 

Gaby, Miliki, Fofó y Fofito formais parte de la memoria colectiva de varias generaciones,. ¿Seguimos siendo vuestro público?

Sí. el otro día me lo comentaba Mónica, mi hija, que me decía: “papá ¿te das cuenta que estamos trabajando para tres generaciones?” y sí, allí estaban sentados el abuelo, el hijo y el nieto. Y recuerdo como el niño de hoy miraba al abuelo con cara de “¿cómo es posible que el abuelo se sepa las canciones, el Susanita, o la gallina turuleca?”  Al final del espectáculo nos quedamos firmando el disco que hemos sacado, y con el que recaudo fondos para la asociación española contra el cáncer, nos hacemos fotos y a veces empalmamos con la siguiente función y todavía quedan personas esperando. Muchos padres me dicen, “me hace más ilusión que me dediques a mi el autógrafo” más que a su hijo. Bueno, parece que la familia Aragón hemos dejado buen sabor.  

Durante años habéis estado entrando en los hogares de muchas familias...

De todas. En aquellos años solo había dos canales, y o vías a Félix Rodríguez de la Fuente, o veías a los payasos de la tele o no veías nada. Nosotros tuvimos la suerte de llegar cuando la oferta de la televisión era esa. 

Fofito, ¿tienes fe en que el Circo saldrá de esta crisis?

No solo el Circo, el fútbol, los toros, el teatro, los conciertos, … todos. Cuando encuentren la vacuna. Hasta entonces tenemos que ser respetuosos, no hacer botellones, y cuidarnos toda la familia.

¿Quieres hacer un llamamiento al público, a las autoridades,  para que sigan apoyando al Circo?

Siempre lo he hecho. He escrito a personalidades para que reconozcan que el Circo es parte de la cultura

¿Es Cierto que fuiste monaguillo antes que payaso?

Sí, cuando estuvimos viviendo en Chicago yo iba a un colegio católico y hacía de monaguillo. Lo que recuerdo es el frío que hacía en Chicago a las siete de la mañana cuando me tocaba hacer de monaguillo.  

¿Eres de los que rezas antes de las actuaciones?

No. El que era más de leer la Biblia era Gaby. Pero sí que justo cuando me están presentando siento los nervios que no se pasan hasta que grito el primer ¿Cómo están ustedessssss?

Non solum sed etiam 

A la tremenda ilusión que me ha hecho entrevistar a Fofito, porque sí, yo también fui de los que se comían el pan y la onza de chocolate viendo los Payasos de la Tele. Bien, pues he de añadir el placer de descubrir la grandeza de los humildes. “Pero si solo soy un personajillo, una persona normal”. Sí, ciertamente, una persona normal que ha logrado hacer reír y divertirse a varias generaciones, y lo sigue consiguiendo. Ya he demostrado en más ocasiones mi cariño por las gentes del Circo. Pronto las caravanas empezarán moverse y trasladar las carpas a otras plazas. Con las mismas medidas que nos piden para acudir a una terraza, a un restaurante, y pronto a un cine y a un teatro, volvamos a las carpas de los circos. Volvamos a disfrutar de la magia del circo. Y los que puedan a escuchar de nuevo en directo ese ¿Cómo están ustedessssss? Biennnnn!!!!! (que falta nos hace)