El cura de Xestoso, partidario de la "Iglesia sencilla e integradora" de Francisco Luis Rodríguez Patiño: "El cristianismo está amenazado por organizaciones religiosas fundamentalistas que fomentan discursos de odio"
"Como párroco de Momán (Xermade) realicé ese gesto como denuncia de las palabras del entonces obispo de Segorbe-Castellón contra homosexuales en el 2014"
"Nunca me anduve por las ramas para criticar opiniones de la jerarquía eclesiástica con las que no estoy de acuerdo, tampoco quiso evitar la contundencia en esta ocasión"
"Este año se han colocado alusiones a la valla instalada en Ceuta para impedir el paso de inmigrantes, y San José, la Virgen María y Jesús no están en el belén sino en la cárcel tras haber protagonizado un escrache ante el palacio de Herodes"
"Este año se han colocado alusiones a la valla instalada en Ceuta para impedir el paso de inmigrantes, y San José, la Virgen María y Jesús no están en el belén sino en la cárcel tras haber protagonizado un escrache ante el palacio de Herodes"
| Luis Ángel Rodríguez Patiño, cura de Xestoso
El papa abre la posibilidad de bendecir las parejas de homosexuales. Esto me recuerda a la sanción canónica que me impuso el Obispo de Santander y en su día Obispo de Mondoñedo Ferrol por denunciar en el portal de Belén la actitud homófoba del Obispo Segorbe- Castellón.
En el portal de Belén había puesto un escrito –cartel: " los gays no pueden entrar en el portal de Belén porque lo dice el Obispo de Segorbe-Castellón". Luis Ángel recordó a Sánchez Monge que Dios es Padre y quiere a todas y todos sus hijos sin ver su orientación sexual. Pero él le respondió que eso iba contra la doctrina oficial de la Iglesia, a lo que Patiño le espetó “que tuviera respeto a las personas, ya que todos somos hijos de Dios y creados a su imagen y semejanza”.
El Papa ya no lo dice de palabra, sino por escrito. El Papa abre la posibilidad de bendecir a las parejas homosexuales. Ahora y ya antes el Papa Francisco había pedido respeto.
Como párroco de Momán (Xermade) realicé ese gesto como denuncia de las palabras del entonces obispo de Segorbe-Castellón contra homosexuales en el 2014.
Entonces, los gais no podían entrar en el belén montado en la capilla de San Antonio, situada en la localidad de Momán, en el municipio chairego de Xermade. La decisión fue tomada por los pastores que estaban alrededor del nacimiento, pues temían que entre los Reyes Magos hubiese una persona con ese perfil y ellos rechazaban a las personas con esa característica. Un cartel con la prohibición de pasar avisaba de esa decisión.
Si eso le parece a alguien un claro gesto de homofobia, conviene aclarar que la intención era precisamente la contraria. Como sacerdote que atiende esta parroquia así como la de Labrada (Guitiriz) y otras en Monfero y en Aranga, quise de ese modo simbolizar públicamente mi abierto rechazo con las palabras del obispo de Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente, que dijo que el matrimonio gay podría generar violencia e hijos con perturbaciones.
Nunca me anduve por las ramas para criticar opiniones de la jerarquía eclesiástica con las que no estoy de acuerdo, tampoco quiso evitar la contundencia en esta ocasión. «¿Quién es un obispo para insultar de ese modo?»,me preguntaba. Incluso afirmaba que sentía «vergüenza» por palabras como esas, e imploraba al Papa que dijese «algo» a unos obispos que, en su opinión, «hacen daño a los hijos de Dios».
El belén instalado en esa capilla de Momán nunca esquiva cuestiones de actualidad, por polémicas que puedan resultar. Así, este año se han colocado alusiones a la valla instalada en Ceuta para impedir el paso de inmigrantes, y San José, la Virgen María y Jesús no están en el belén sino en la cárcel tras haber protagonizado un escrache ante el palacio de Herodes.
Si analizamos la historia de la Iglesia en los dos últimos siglos, podemos comprobar que, salvo honrosas excepciones, se ha opuesto a la nueva forma de comprensión de la realidad: mundo material, persona, Dios, surgida de la Ilustración. Surge una nueva manera de ver e interpretar el mundo. La inteligencia debe iluminar la vida humana y conocer la realidad en la que se mueve, la razón debe ser la que guíe al hombre. La tradición con su argumento de autoridad debe ser sometida al examen de la razón, la misma revelación no puede escapar a este examen. No es extraño que en la época restauracionista, después del Vaticano II, por no hablar de la lucha antimodernista, se hablase contra la Ilustración y se acusase de relativismo a todo lo que se movía.
Chesterton afirmaba: “La Iglesia nos pide que al entrar en ella nos quitemos el sombrero, no la cabeza”
Así pues, "en la Iglesia hay sitio para todos, repitan conmigo, para todos, todos, todos", dijo el Papa Francisco. Pero por desgracia siempre habrá quienes acusen a otros de fomentar divisiones, generar odios y abonar el camino al cisma.
El cristianismo a nivel global está hoy amenazado por organizaciones religiosas fundamentalistas que fomentan discursos de odio y son contrarias a los valores del cristianismo originario. A su vez se encuentran en alianza con la extrema derecha y cuentan con el apoyo de importantes sectores de la jerarquía católica, que se convierten con frecuencia en sus portavoces.
Francisco está trazando las líneas para una Iglesia más sencilla, integradora de todas las sensibilidades. En la Iglesia caben todos, hasta tres veces, les hacía gritar a los jóvenes en Lisboa. Aunar esfuerzos para crear una Fraternidad eclesial plural y diversa, integradora, y no excluyente.
Decenas de teólogos, profesores y hasta obispos sufrieron las iras y la represión de una Curia vaticana que actuaba sin misericordia ni miramientos con los suyos propios. Por el “pecado” de querer ser fieles al Concilio Vaticano II.
Tuvo que venir el Papa de la primavera, para rehabilitarlos y recuperarlos. De hecho en una visita a Roma de José María Castillo, el Papa Francisco le dijo: “Le agradezco lo que está escribiendo y publicando. Le ruego que no deje de escribir y publicar porque le hace mucho bien a la gente”.
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