Así lo han confirmado a Europa Press fuentes del Arzobispado compostelano, después de que este miércoles, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunciase que ha remitido una carta al arzobispo, Julián Barrio, para solicitar que se estudie la posibilidad de ampliar a 2022 la celebración del Año Santo, teniendo en cuenta la posible interferencia del coronavirus en el inicio del mismo durante el próximo invierno.
La celebración del Año Santo, con la apertura de la Puerta Santa de la Catedral de Santiago y las indulgencias concedidas a los peregrinos con este motivo, está condicionada por el calendario, dado que tiene lugar en aquellos años en los que el día de Santiago Apóstol, el 25 de julio, cae en domingo. El de 2021 será el que se produce tras el periodo más largo de la cadencia, de 11 años.
Sin embargo, la concesión de años jubilares y jubileos extraordinarios, así como la posible modificación de esta celebración eclesiástica, no depende del arzobispado, si no que es una competencia de la Santa Sede en la persona del Papa.
Por el momento, el Arzobispado de Santiago recuerda que el Año Santo comenzará, como está previsto, el próximo 31 de diciembre y, en principio, se extenderá durante un año, sin que por el momento existan novedades al respecto.
No obstante, han admitido que, "en su momento", y "dependiendo de las circunstancias" que así lo puedan recomendar, "se haría la propuesta que favoreciera el conseguir los objetivos espirituales y pastorales del Año Santo", algo que se hará, en todo caso, "teniendo en cuenta a los peregrinos" y "el sentido de la peregrinación" que es, precisamente, lo que motiva la celebración del Año Santo.