"Las esperamos, con las puertas abiertas, pero la legalidad es la legalidad" Iceta da hasta comienzos de julio a las exclarisas para que abandonen Belorado: "No son monjas, ¿qué hacen en un monasterio de clausura?"
"De no producirse una salida voluntaria en fechas próximas, los servicios jurídicos no tendrán más remedio que iniciar las acciones legales a las que haya lugar"
Iceta anunció que varias religiosas acudirán en breve a cuidarlas y a asegurar que puedan recibir una asistencia católica” para que “la vida monástica católica sea restablecida y siga viva en esta comunidad”. “Nos interesan las personas y no las piedras”, recalcó
"Las propiedades e inmuebles son bienes eclesiásticos pertenecientes a los monasterios como entidades jurídicas públicas eclesiásticas al servicio de la comunidad de clarisas que sigue habitando estos monasterios"
"Las propiedades e inmuebles son bienes eclesiásticos pertenecientes a los monasterios como entidades jurídicas públicas eclesiásticas al servicio de la comunidad de clarisas que sigue habitando estos monasterios"
"He rezado un rosario por las hermanas, y lo seguiré haciendo. La Iglesia seguirá esperando, con las puertas abiertas, para que estas exreligiosas sean conscientes de la realidad, y emprendan el camino de vuelta a casa. Las esperamos, con las puertas abiertas, pero la legalidad es la legalidad”. El arzobispo de Burgos y representante pontificio de los monasterios de Derio, Orduña y Belorado, Mario Iceta, dio el plazo de “unos días” a las ex monjas cismáticas para que abandonen el monasterio, toda vez que ya no pertenecen a la vida religiosa. “No son monjas, ¿qué hacen en un monasterio de clausura?”, apuntó, si bien se negó a llamarlas ‘okupas’.
“Las diez ex religiosas deberán abandonarlos”, señaló Iceta, quien incluyó “con mayor razón” a De Rojas y Ceacero. ¿Y si no salen? “De no producirse una salida voluntaria en fechas próximas, los servicios jurídicos no tendrán más remedio que iniciar las acciones legales a las que haya lugar”. Aunque no quiso dar fechas, Iceta sí habló de “primeros días de julio”, confiando en que “ellas se den cuenta de que, al no ser ya religiosas, no pueden permanecer en ese lugar”.
“No hemos establecido un plazo, queremos ser muy respetuosos (…). Nosotros tendremos paciencia, pero a veces la paciencia se transforma en acciones”, advirtió el prelado, quien compareció junto a la hermana Carmen Ruiz, secretaria de la Federación de Hermanas Clarisas de Aránzazu,; Donato Miguel Gómez Arce, vicario judicial de la archidiócesis de Burgos; y Rodrigo Saiz García, director del Departamento de Asuntos Jurídicos del Arzobispado de Burgos.
"Son ellas las que deciden irse"
Iceta sí quiso dejar claro que, pese a los decretos de excomunión y expulsión de la vida consagrada de las diez monjas, “son ellas las que deciden irse. Esto es importante: no se las echa de la Iglesia”. “Nosotros solo declaramos que han marchado de la Iglesia católica”, lo que “conlleva que no forman parte de la comunidad de Belorado y Derio”.
“Sigue existiendo una comunidad monástica en Belorado, hay otras ocho monjas que pertenecen al monasterio: las cinco hermanas mayores y otras tres que pertenecen canónicamente"
“Sigue existiendo una comunidad monástica en Belorado, hay otras ocho monjas que pertenecen al monasterio: las cinco hermanas mayores y otras tres que pertenecen canónicamente” al mismo, recalcó el arzobispo de Burgos.
“Las hermanas mayores siguen siendo una prioridad y preocupación que comparten sus familiares, están preocupados por ellas”, añadió, anunciando que varias religiosas acudirán en breve a cuidarlas y a asegurar que puedan recibir una asistencia católica” para que “la vida monástica católica sea restablecida y siga viva en esta comunidad”. “Nos interesan las personas y no las piedras”, recalcó, pidiendo tiempo y negando que haya “una estrategia” establecida. Entretanto, un obispo y una religiosa, sor Lucía Caram, han intentado mediar, sin éxito, con las ya ex religiosas.
Hay que inyectar liquidez
En cuanto a lo económico, el prelado admitió que “hay que inyectar liquidez” al monasterio, tras observar que el saldo de la decena de cuentas a la que han tenido acceso (pues nada se sabe del destino económico de la venta de chocolate) apenas tiene 5-6000 euros, inviable para pagar los sueldos de las personas que trabajan en el monasterio, así como los suministros y pagos ordinarios. “El 22 de junio se requirió a doña Laura García de Viedma (exabadesa) toda la información económica”, apuntó Iceta. La respuesta fue declararles “personas no bien recibidas” y una denuncia contra el prelado.
Sí quiso dejar claro Iceta que “las propiedades e inmuebles son bienes eclesiásticos pertenecientes a los monasterios como entidades jurídicas públicas eclesiásticas al servicio de la comunidad de clarisas que sigue habitando estos monasterios”. “Llevan más de seis siglos al servicio de las clarisas, y tienen que seguir”, aclaró el comisario pontificio, quien insistió en que las ex religiosas “no tienen posibilidad de alterar la naturaleza eclesiástica pública de los monasterios si no es con el consentimiento explícito de la Santa Sede”.
Y es que, informó, “los Acuerdos del Estado Español con la Santa Sede establecen que la legislación canónica actúa como Derecho estatutario en la capacidad de obrar de las entidades religiosas, por lo que en ningún caso los bienes propiedad de los monasterios podrían pasar a ser considerados como meros bienes para disponer libremente de ellos”. Por ello, “no tiene sentido la constitución de comisión alguna”, como reclaman los abogados contratados por las ex religiosas. “No cabe otro recorrido más que el cumplimiento de la legalidad vigente”.
¿Sobre los inmuebles? "Cúmplase la ley"
“¿Sobre qué se quiere dialogar? Sobre los inmuebles, cúmplase la ley. ¿De qué quieren dialogar? Yo debo ser un administrador escrupuloso de los inmuebles. ¿Qué patrimonio han aportado al monasterio? Lo hemos recibido de siglos de personas que han donado al monasterio. El patrimonio es de los monasterios que se han constituido durante siglos para que haya habido una vida monástica. No se ha donado para que ahora haya un grupo que no es católico”, recalcó el arzobispo de Burgos.
En todo caso “siempre vamos a actuar de modo pacífico. Si se avienen a la ley, adelante. Y si no, un juez tendrá que hacer que prevalezca la ley. Ellas abrieron esa vía al denunciarme”, insistió, señalando en que las ex religiosas “ya deben saber que no forman parte de la orden de las clarisas, y bien saben que ese no es su lugar. Depende del camino que tomen ellas y estos dos señores”.
Sí que dejó claro Iceta que la actitud que se tendrá con las ex religiosas será distinta a la referida a Ceacero y De Rojas. “Los servicios jurídicos ya han impelido a estas personas a que abandonen el monasterio, y de modo feaciente y contumaz permanecen”, señaló, anunciando que “va a haber una diferencia muy grande entre estas personas y las hermanas”.
Respaldado por la Santa Sede
¿Se siente respaldado por la Santa Sede?, le preguntaron. “Me siento respaldado. He estado muy en comunicación tanto con el dicasterio de Doctrina de la Fe como de Vida consagrada”, aunque no supo decir si el Papa Francisco está informado. Sí lo están los familiares, “muy preocupados por cuidar sus familiares mayores, que algunas llevan 80 años de vida religiosa”. ¿Cómo se encuentran? “Están físicamente bien cuidadas, pero no están asistidas por la Iglesia católica, y eso nos preocupa”.
¿Es reversible este camino? “Siempre la excomunión es reversible. Ellas han decidido marcharse. La Iglesia desea su regreso, yo rezo por su regreso, las esperamos con los brazos abiertos”. ¿Qué tendrían que hacer? “Lo que hace el hijo pródigo, darse cuenta dónde ha llegado”, reflexionó Iceta. “Ojalá hubiera personas que les ayudaran a reconocer la situación en la que están, y que el camino es posible, y de que reflexionen en aquello que deben cambiar para volver a casa. Les ayudaremos en el camino de vuelta y de reinserción”, culminó, dejando claro que para recuperar sus votos “primero deben ser readmitidas en la Iglesia católica”.