Agua sobre mi cabeza
¡Feliz viernes! El maestro de hoy es de esos que tienen un apellido ilustre de gran renombre. No es el representante más conspicuo de la saga, pero también merece la pena ir más allá. Sin más preámbulo, vamos a saber quién es.
Hablo de Johann Christoph Bach (1642-1703), compositor alemán nacido en Arnstadt. Estudió música con su padre y fue organista de la capilla de Arnstadt con 1663. De ahí, un par de años después, pasó a Eisenach para sentarse a los teclados del instrumento de la capilla de duque, de la que Johann Pachelbel era miembro. Este era el organista de la corte y ambos tuvieron oportunidad de hacerse amigos y recibir influencia entre sí. Un poco más tarde el propio Johann Christoph fue nombrado clavecinista de la corte del duque. El maestro de capilla era Telemann, por lo que también Johann Christoph Bach también conoció a este gran maestro barroco alemán.
Este maestro nos ofrece Ach, daß ich Wassers gnug hätte. Es un lamento para voz de alto y acompañamiento. La obra se dio por perdida y fue redescubierta en Kiev en 1999. La voz canta con un gran virtuosismo y durante muchos años fue atribuida a Heinrich Bach (el padre de nuestro compositor de hoy) aunque la musicología moderna se ha encargado de ponerla en su sitio. La composición es extraordinariamente concentrada y está llena de una emoción que nos llega muy adentro.
La partitura de la pieza puede descargarse aquí.
La interpretación es de Christopher Lowrey (tenor) y Voices of Music.