Ave María
¡Feliz sábado! Vamos a disfrutar hoy de una bella composición dedicada a la Virgen (lo que es habitual aquí cada sábado) compuesta por un maestro que no es demasiado conocido. De hecho, no sé ahora mismo si ha aparecido por aquí antes.
Hablo de Eduard Tubin (1905-1982), compositor estonio nacido en Alatskivi; estuvo activo en Suecia. De hecho, es uno de los compositores más prominentes de Estonia junto con Arvo Pärt. Sus primeras composiciones se ven influidas por la música rusa. Estudió en Tartu con Eller. Luego se marchó a Suecia debido a la ocupación rusa de Estonia y allí permaneció hasta su muerte. Terminó alcanzando prestigiosos reconocimientos, como el premio Atterberg y un puesto en la Real Academia de la Música. Sus obras más reconocidas fueron las sinfonías, en las que no utiliza elementos folklóricos, al modo de Sibelius. También asimiló los estilos francés y ruso en vez de los nórdicos. Supo llevar la teatralidad narrativa a los géneros de concierto.
Vamos a escuchar su Ave María. Es una obra para coro masculino y órgano que fue compuesta en 1952. El coro canta de una forma tranquila y encantadora. En la sección intermedia, con el texto del Benedicta tu, el movimiento se hace algo más animado y comienza ahí un amplio crescendo que termina en ora pro nobis peccatoribus. El estreno de esta bella composición fue estrenada el 24 de enero de 1953 en la iglesia de Santiago de Estocolmo. El propio compositor dirigido está pequeña pieza que hoy hará nuestras delicias.
La interpretacion es del Lunds Studentsångare.