¡Feliz sábado! Este día es aquel en el que tradicionalmente la Iglesia celebra a la Virgen de una forma más intensa y especial. Por ello, cada sábado disfrutamos aquí de música también dedicada a la Madre de Dios, un bello ejemplo de la cual escucharemos hoy.

El compositor de hoy se trata de Bartolomeo Tromboncino (h. 1470-1535), compositor italiano nacido probablemente en Verona. Compuso más de casi doscientas frottolas, un género muy en boga en la época. A los veinte años era trombonista de Francissco II Gonzaga en Mantua, donde tocaba en varias fiestas y solemnidades. Pasó una vida turbulenta ya que en 1599 mató a su esposa al encontrarla con un amante, muy al estilo de Gesualdo. En 1508 trabajó para Lucrecia Borgia en Ferrara y luego para el cardenal Hipólito I d'Este en la misma ciudad. Este maestro fue yendo y viniendo por distintos trabajos en una vida algo complicada. Sea como fuere, la calidad de las obras de este compositor son de probada solvencia y constituyen una muestra de ese interesante periodo de cambio entre el renacimiento y el primer barroco en Italia.

Precisamente es una frottola la que vamos a escuchar hoy, y se titula Ave Maria. La música no sigue ningún tipo de cantus firmus, sino que tiene esa inspiración popular digamos que le aporta este género del que el maestro de hoy era tan virtuoso. En toda la obra, la voz de soprano y la de bajo cantan en paralelo, mientras las otras dos se embuten en ella, con un movimiento algo más libre. La bella composición de hoy fue publicada en Venecia por Ottaviano Petrucci en una colección de 1508 titulada Laude, Libro secondo.

La partitura de la obra puede descargarse aquí.

La interpretación es de The Consort of Musicke.