¡Feliz jueves! La música puede verdaderamente ser luz en la noche, luz en lo oscuro, y la de hoy puede serlo. De todas formas, esto es muy subjetivo puesto que la música es de por sí abstracta y termina describiendo casi lo que queramos.

Nuestra compositora de hoy es Alma Mahler (1879-1964), compositora austríaca nacida en Viena; su apellido de nacimiento era Schindler. Es la presencia del de Mahler la que la dotó de una fama inicial. No compuso mucho (solo dieciséis canciones) que nos muestran su talento. Su padre era pintor y Alma debió ser muy bella ya que Klimt la retrató varias veces. También tenía un gran talento para el piano y recibió algunas lecciones de composición de Zemlinsky. Fue Mahler quien le dio el apellido y el que la obligó a que dejase la composición, algo que luego incumplió. Se dedicó a servir de copista de su marido. En el verano de 1910 se enamoró de Walter Gropius (fundador de la Bauhaus). Se casó en 1915 con Gropius, pero se divorciaron y se volvió a casar en 1929 con Franz Werfel. Se estableció en Nueva York donde publicó las cartas y los documentos de Gustav Mahler y sus propias memorias. Una mujer que llevó una vida de lo más ajetreada (por lo menos sentimentalmente) y cuya valía para la música nos hubiera gustado comprobar de una forma más patente, porque la tenía, y mucha.

Vamos a escuchar el lied suyo titulado Licht in der Nacht. Fue compuesto en 1901 con texto de Otto Julius Berbaum. Junto con otras, trata sobre la narrativa de la luz. La compositora establece una tensa progresiones de acordes, que continuamente parece que van buscando una resolución, pero siempre buscando intentar un camino, ya sea entre la oscuridad o entre la luz. La compositora intercala ciclos octatónicos y hextónics entre las quintas diatónicas. La armonía es funcional y está diseñada para iluminar toda esa complejidad que Mahler imprime a esta bella miniatura.

La partitura de la pieza puede descargarse aquí.

La interpretación es de Barbara Hannigan (soprano) y Reinbert de Leeuw.