Un proyecto para políticos y ciudadanos
Dirigido tanto a los responsables políticos como a todos los ciudadanos, el proyecto va acompañado de una página web especial que recoge todos los recursos útiles para tratar la polarización en cualquier ámbito: parroquias, grupos, familias. Estos recursos consisten en oraciones por la paz, inspiradas en la figura de San Francisco de Asís, y en reflexiones sobre el tema "Amar al prójimo a través del diálogo". También se invita a los visitantes de la página a firmar "un compromiso con el que afirman que apostarán por la caridad, la claridad y la creatividad para promover la comprensión mutua en lugar de la división".
Ser constructores de puentes
Los firmantes también se comprometen a "afirmar la dignidad de todas las personas, incluso cuando no estén de acuerdo con alguien, y a escuchar respetuosamente a los demás, para comprender las experiencias diferentes de las propias".
Los obispos también invitan a hacer "un examen de conciencia para garantizar que las perspectivas de cada uno estén radicadas en la verdad, que sus fuentes de información sean imparciales y que nadie se deje manipular por intereses partidistas".
Otras sugerencias son convertirse en "constructores de puentes que participen en un diálogo constructivo basado en valores compartidos" y "ver las diferencias de opinión como una oportunidad de crecimiento creativo que puede producir soluciones para el bien común". Todo con el fin de reiterar que "en el debate político, la virtud que cuenta es el civismo, no el rencor".
Los documentos de base
En el trasfondo de la iniciativa hay dos documentos: la Encíclica del Papa Francisco "Fratelli tutti", con la que el Pontífice exhorta específicamente a los católicos y a todas las personas de buena voluntad a construir un tipo de política mejor, al servicio del bien común, y la carta pastoral “Forming Consciences for Faithful Citizenship"- "Formando conciencias para una ciudadanía fiel", que la USCCB publica cada cuatro años de cara a las elecciones presidenciales. El texto, cuya última edición se publicó en septiembre de 2020, sugiere que los fieles deben priorizar la fe sobre la política partidista y participar activamente en la vida civil para responder a los problemas acuciantes de nuestro tiempo.
Seguir el ejemplo del Buen Samaritano
"Como católicos", concluyen los obispos estadounidenses, "tomamos a pecho la invitación de Jesús a seguir el ejemplo del buen samaritano, que nos desafía a ser prójimos de todos. De este modo, "podemos vernos como miembros de una misma familia. Podemos buscar el encuentro y el crecimiento. Podemos identificar valores comunes. Podemos escuchar para comprender. Podemos buscar la verdad juntos. Podemos encontrar juntos soluciones creativas a los problemas de nuestro mundo", "imaginando una nueva forma de estar en la sociedad a través del encuentro con el prójimo, el hermano".
Nacida en 2016 en la archidiócesis de Cincinnati, la idea de "Civilízalo" atrajo luego la atención de toda la Uscbb, que en 2019 retomó el modelo y lo propuso, con algunas modificaciones, a nivel nacional. Actualmente, al menos 45 diócesis están trabajando para incorporar la iniciativa a sus programas y se espera que otras Iglesias locales hagan lo mismo.