"Los católicos de Washington se unen hoy a los hombres y mujeres de buena voluntad de aquí y de todo el mundo para rezar por los que perecieron en el desgarrador accidente de anoche en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan". El cardenal Wilton Gregory, administrador apostólico de Washington, ha lamentado la tragedia que ya se ha cobrado 67 vidas, sin supervivientes.
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"Alabamos a Dios por la generosa ayuda de nuestros valientes equipos de primera respuesta", señaló el purpurado, que será relevado en breve por el cardenal McElroy, en un comunicado, en el que rogó "que este desastre sirva de impulso para fortalecer nuestra unidad y colaboración".
Por su parte, el obispo Michael Burbidge de Arlington, pidió oraciones por todos los afectados por la tragedia. "Unámonos en oración por todos los afectados trágicamente por el accidente cerca del aeropuerto Reagan", señaló el prelado, quien pidió a Dios "que los abrace en su amor, que conceda fuerza a sus familias y que vele por todos los equipos de primera respuesta".
Para el obispo de Baltimore, William Lori, "nuestros corazones están con aquellos que perdieron la vida en la trágica colisión en el Aeropuerto Nacional Reagan". "Oremos por ellos y por sus seres queridos que los lloran. Nuestros pensamientos y oraciones también están con los socorristas durante este momento tan difícil".
