Denuncian el encubrimiento de la Iglesia ante los abusos a niños sordociegos Las víctimas del 'caso Próvolo' exigen una reunión con el Papa en Roma
Nicola Corradi y Horacio Corbacho Blanc fueron condenados a 42 y 45 años de cárcel, respectivamente
“La Santa Sede pudo haber actuado para prevenir la violencia sexual y física generalizada contra niños sordos perpetrada por sacerdotes, monjas y personal administrativo en el Instituto Antonio Próvolo, institución educativa y religiosa para sordos de la provincia (argentina) de Mendoza”
| RD/Agencias
El caso es uno de los más atroces de los últimos años. Menores sordociegos fueron esclavizados, torturados y abusados, durante décadas, por dos sacerdotes, Nicola Corradi y Horacio Corbacho, con la ayuda de un jardinero, que fueron condenados a más de cuatro décadas de prisión. Ahora, las víctimas del Instituto Próvolo viajan a Roma y Ginebra, y exigen una reunión con el Papa Francisco, además de denunciar cómo la institución 'miró hacia otro lado' cuando se produjeron las denuncias.
Con apoyo de ECA (End Clergy Abuse), las víctimas han pedido "una reunión pública" con el Papa. Un encuentro que quieren hacer coincidir con el primer aniversario de la cumbre antipederastia convocada en el Vaticano, y que, para muchos supervivientes, no ha servido para mucho.
“La Santa Sede pudo haber actuado para prevenir la violencia sexual y física generalizada contra niños sordos perpetrada por sacerdotes, monjas y personal administrativo en el Instituto Antonio Próvolo, institución educativa y religiosa para sordos de la provincia (argentina) de Mendoza”, sostiene un comunicado de ECA, que denunció no haber obtenido respuesta a la solicitud enviada al Vaticano.
“Fuimos violados, abusados sexualmente y torturados físicamente por sacerdotes católicos, monjas y laicos… Nuestra historia llega al corazón mismo del encubrimiento de estos crímenes en nuestro país. Los crímenes no fueron secretos ni para los funcionarios de la iglesia en Argentina ni para los funcionarios del Vaticano“
Las víctimas, que viajan acompañadas por los abogados querellantes, desean entregar un informe sobre el caso en el que acusan al Vaticano y al papa de encubrimiento. El informe será entregado también a la comisión sobre los derechos humanos de la Organización de las Naciones Unidas en Ginebra, Suiza.