Cada año nacen menos niñosen España. En el primer semestre de 2022 nacieron159.705 bebés, la cifra más baja de nacimientos desde 1941, año en el que comienza la serie histórica. 

En una lejana tierra

Erase un lejano reino

Donde apenas nacen niños

Y todo se vuelve viejo.

Hay juguetes muy, muy caros,

Y columpios muy modernos

Que esperan abandonados

A que alguien juegue con ellos.

Que la vida es complicada,

Que sale caro tenerlos,

Que en artículo de lujo

Los niños se convirtieron.

Preferimos tener cosas,

 llamar hijo a los perros

Y llevarlos en carritos,

darles en el morro besos,

Vestirlos con trajes lindos,

Recoger sus excrementos

Y hacerles un panteón

En los nuevos cementerios.

No sé de quién es la culpa,

Si del clima o del gobierno,

Pero la gente se casa

Con  treinta y tantos eneros.

Cuando pueden tener hijos

No se permiten tenerlos

Y cuando ya se deciden

Se pasó el arroz tres pueblos

Y a clínicas de asistencia

Peregrinando les vemos

Mientras tristes y vacíos

Se van cerrando colegios.

Quedaban muy pocos niños

En ese lejano reino

Y como extraños fenómenos

En tiranos se volvieron

Caprichosos, delicados,

Alérgicos al esfuerzo,

Apartados del fracaso

Donde siempre les dan éxito,

Sin hermanos , aburridos,

Y amarrados al teléfono.

“De los que son como niños

Es el Reino de los cielos”,

“ dejad que los niños vengan

A mi” dijo el Carpintero.

“Quien escandalice a un niño,

Y su fe acabe rompiendo

Más vale  lo trague el mar

Con una piedra en el cuello”

¡Ojala vuelvan los niños

A llenar de nuevo el Reino!

Que nos traigan carcajadas,

Pompas, carreras y juegos.

Hay algunos que se lanzan

Y tienen varios pequeños

Sin que les ayude nadie,

¡Bastante tiene su mérito!

Helado de canas viejas

Y con los asilos llenos

Sin esperanzas apenas

Se anquilosa nuestro Reino.

¡Que vuelvan, vuelvan los niños

A llenar todos los pueblos

De esperanza y alegría

Vencedores al invierno,

Primavera de la vida¡

¡Vengan niños a este Reino!

Dedicado a mis sobrinos Isma, Diego, Samuel, Pilar Cristiana, Alejandro, Adrián, Martín y Lucía. ESpero que tengan una vida feliz. Y a todos los niños de mis amigos que están muy animados repoblando el planeta. Olé por ellos. Los padres y las madres conocen verdaderamente el corazón de Dios.