Melchor, Gaspar y Baltasar están documentados por primera vez en un códice del siglo VII, que se conserva la Biblioteca Nacional de París Los Reyes Magos eran sacerdotes teólogos de la astronomía del antiguo Oriente
En el Sultanato de Omán, país musulmán, defienden que los Reyes Magos salieron de allí hacia Belén
En la tradición literaria valenciana, Gaspar aparece como rey de Saba, Baltasar como rey de Arauia y Melchior como rey de Tarsis.
| Baltasar Bueno, corresponsal en Valencia
La literatura sobre los Reyes Magos de Oriente, tan entrañables para grandes y pequeños en las fiestas cristianas navideñas, se remonta a la antigua Persia, donde los sacerdotes recibían el nombre de Mogh, estudiosos de la teología astronómica. Recordemos en Génesis la descripción de cómo Dios crea el firmamento, comenzando por la luz, principio de toda reacción química. Sin luz no hay vida. Las lenguas contemporáneas de la persa, siríaca, egipcia, griega y latina utilizaron ya la palabra tal como la conocemos, magos: sacerdotes astrónomos.
De su reconocida fama como expertos astrónomos ya daba cuenta en su tiempo Cicerón en su tratado “De divinatione”. Es la tradición, que no la documentación, la que habla de que fueron Reyes y tres. Una tradición que se fija oral y pictóricamente en la época de las Catacumbas, inicio del cristianismo. En su derredor, variaciones múltiples sobre el mismo tema, con un mismo denominador común.
Lo mismo pasa con los nombres, Melchor, Gaspar y Baltasar, que aparecen por escrito en el siglo VII en un códice que conserva la Biblioteca Nacional de París. Beda describe a Melchor como el más anciano, con barba. El más joven es Melchor, rubio, lampiño. Y Baltasar es negro, con nutrida barba. No obstante, en la abundante iconografía arqueológica no aparecen exactamente así.
Los que se han acercado al tema en las distintas épocas no se ponen de acuerdo en sus países de procedencia, concluyen que pudieron ser de Persia, pero hay tradiciones nacionales opuestas a esta teoría. Es el caso de Omán, sultanato árabe, donde tienen como orgullo y timbre de honor que no uno, sino los tres Reyes Magos salieron de allí hacia Belén siguiendo la estrella. Así nos lo contó la guía oficial a ungrupo de periodistas que visitamos el Sultanato de Omán, país musulmán, invitados por su gobierno.
La estrella está presente en el Antiguo Testamento como anunciadora del que ha de venir. En Num. 24,17, Balaam profetiza que “Nacerá una estrella de Jacob”. Jesús nació de la estirpe de Jacob, última cadena de su genealogía relata en el Evangelio. En sus observaciones astronómicas vieron el meteoro manifestado de forma extraordinaria y le siguieron hasta Jerusalén y luego hasta Belén. Kepler afirma que dicho fenómeno “pudo ser producido por la conjunción de los planetas Marte, Júpiter y Saturno, la cual había de producir una combinación de luz muy intensa”.
Lógicamente, los Reyes Magos no llegaron a Belén días después de nacer Jesús. Eso queda para la didáctica del ciclo litúrgico de la Iglesia. Uno de los cálculos hechos por expertos habla de que tardarían dos meses en aparecer por allí. No ocurrió el encuentro en un establo o pesebre, Mateo habla ya de casa.
Estos curiosos personajes se quedaron luego por allí, se unieron a la causa del cristianismo. Murieron mártires en Palestina. El emperador Constantino el Grande se llevó sus cuerpos a Constantinopla (Estambul, Turquía), luego fueron enviados a Milán (Italia) y de aquí a Colonia (Alemania), regalo del emperador Federico Barbarroja al obispo de aquella ciudad en 1164, donde hoy reposan en su magnífica catedral.
La tradición valenciana
En la tradición literaria valenciana de Reyes Magos, que se remonta al siglo XV, contenido su núcleo en un “Misteri de Corpus”, un teatrillo popular en Lengua Valenciana, que se representaba por calles y plazas de la ciudad y en la procesión de la solemnidad de Corpus Christi, a los Reyes Magos se les asigna país. En 1408, aparecen figurantes de los Reyes Magos en la procesión de Corpus Christi de Valencia. Estos integraban el cuadro de actores del Misteri de Herodes, basado en el relato evangélico de la adoración de los Reyes Magos, la huida a Egipto y la degollación de los Inocentes ordenada por Herodes, (Mateo, 2, 12-23). Además contiene detalles procedentes de los evangelios apócrifos y de escritos de los Santos Padres.
Hasta el siglo XVI este Misteri era la suma de tres distintos. En él, Gaspar aparece como rey de Saba, Baltasar como rey de Arauia y Melchior como rey de Tarsis. El Misteri que ha llegado hasta nuestros días fue escrito por autor anónimo a mediados del siglo XVI, razón por la cual su estructura está muy elaborada y semeja la de un Auto Sacramental. Lo detallo en mi libro «La procesión de Corpus Christi de Valencia», con fotos de Pedro Molero.
El rey Melchor habiendo visto aparecer una estrella en Oriente deja su reino de Tarsis y se encamina hacia Judea en compañía de su paje. Por el camino, se encuentra con los reyes de Saba y Arabia que llevan la misma ruta. En el Misteri hay diálogos como éste:
Sabi 1.- Sus, miren les nostres llei, / Serquen be les profetes, / perque al nostre ver Mesies/ van sercant aquestos reys. / Asi el profeta Iasahies/ diu que una verge parirá, / el qual Manuel se dira,/ y aquest es lo ver Mesies.Sabi 2.- Jacob diu en profesia / quel setro nos llevara/ de la casa de Juda/ fins a que vinga el Mesies. Sabi 1.- Dons asi diu Daniel/ paraules molt mes que humanes, / que dins setantasemanes/ vindra lo be de Israel./ Destes semanes sabrau/ que es pren lo dia per añy, / y de aso no reba engañ, / quel tems acortant se ua. Sabi 2.- Asi a Davit señalat/ que tres reys de Orient uindran/ y presents li portaran/ en ser lo Mesies nat. Sabi 1.- Esaies diu y acaba/ que ab dromedaris, gamells, / portant or, ensens, emb ells, / vindran de Media, Efa y Saba/ y aso entenc que será/ quant será nat lo Señor, / que ab presents dantli llaor / uindran ab suprem plaer. Sabi 2.- Ya o he trobat, asi esta: / el gran Michaheas es est, / «De tu Belem terra Juda/ ne quaqua minima est, / de tu exira aquell tan fel/ de tot en tot lo millor, / lo qual será lo Señior/ que regirá Hisrael / trobaran/ que axi o diu la profesia. Herodes .- Dons, grans reys. Fase sa uia, / I en Belem lo sercaran/ i si allí el pensen trovar/ tornarsen an per asi/ y darme an auis a mi, / quel vull anar a adorar. “
Llegados a Belén, los Reyes adoran al Niño Jesús, momento en que la Virgen María les dice: “Amichs meus, este es lo infant/ questa asi tan resplandent, / Rey inmens, Deu prepotent, / que esta Israel esperant. Aqueste es lo Rey de Reys, / aqueste es lo Senyor dels señors, aqueste es del mon Salvador, / que us dara les noues lleis/ aqueste es lo Filll de Deu, / e sent Deu, tanbe es fill meu/ en quant home en aquest dia.”