Convocada por el Comité Óscar Romero y con una amplia participación de las Asociaciones de colombianos en Barcelona y retransmitida en directo por Mi Radio Colombia se celebró la misa por las víctimas de la represión y por la paz y la reconciliación.

Tras le presentación de la iniciativa por Eusebio Argueta, presidente del Comité Óscar Romero, se ofreció un estado de la cuestión sobre la situación en Colombia y sobre la protesta social. Así de destacó la situación de grave desigualdad donde el 42,5% de su población se encuentra en condición de pobreza y con el 15,1% de la misma en condición de pobreza extrema. Igualmente se denunció las iniciativas gubernamentales que no potencian una fiscalidad justa y que ponen en grave riesgo la supervivencia de los más empobrecidos. Además, se señaló que la pandemia de Covid-19 ha afectado de forma masiva a los más vulnerables siendo uno de los países de mayor incidencia.

Durante la celebración se destacó la disposición a acoger y apoyar desde Barcelona la protesta social desde la solidaridad de los colombianos en la diáspora.

En la homilía de destacó citando al papa Francisco que “somos analfabetos en acompañar, cuidar y sostener a los más frágiles y débiles de nuestras sociedades desarrolladas. Nos acostumbramos a mirar para el costado, a pasar de lado, a ignorar las situaciones hasta que estas nos golpean directamente (Papa Francisco, Fratelli Tutti, 64). Y desde aquí la importancia de promover la reconciliación desde la justicia restaurativa por encima de intereses económicos y visiones partidistas. Así en la celebración de la fiesta de la Ascensión se insistió en que el Resucitado nos recuerda en que no podemos quedarnos mirando al cielo sin poner los pies en la tierra y que las señales apuntan a que los creyentes “agarrarán serpientes en sus manos y aunque beban veneno no les hará daño”. En este sentido lucharán ante la injusticia y mantendrán su compromiso con los más pobres.

Citando al arzobispo de Cali, ciudad que ha padecido especialmente la represión, Darío de Jesús Monsalve dijo: “Nos duele que las instrucciones sean disparar”, “nos arruga el alma la muerte de tantas personas”. En esta dirección se hizo memoria de los muertos y se planteó la urgencia del esclarecimiento de los hechos violentos y de la situación de los desaparecidos.

En la conclusión un grupo de jóvenes colombianos manifestaron su compromiso por denunciar la situación, promover la reconciliación, acompañar a las víctimas y aportar por los medios no violentos.

Con la actuación artistas colombianos se concluyó este encuentro que se suma a las iniciativas de apoyo a la protesta social sobre la situación en Colombia.