Animo a cualquiera a ver la foto y a encontrar diferencias de imagen entre dos pontifices. Me da pena por el pobre Benedicto XVI, eclipsado en su pontificado por Juan Pablo II, y también casi olvidado en el siguiente por el terremoto Bergoglio. Olvidado como pontifice y estando con vida viendo como este Papa cambia los excesos que él debió haber cambiado.
Pienso que si hubiera sido elegido Bergoglio en el Conclave anterior, antes se podría haber olvidado a Juan Pablo II y se habría evitado el gran drama que sufrió Benedicto XVI de ser comparado contínuamente con su antecesor. Por no hablar, que su antecesor ayudó a su mala imagen y a imponerle una hoja de ruta de sus actividades que no iban con su persona y caracter y que solo debilitaron su salud. Pero lo que está haciendo Francisco es marcar el terreno de su pontificado dejando claro que seguirá su propio estilo le pese a quien le pese. Y que su agenda es suya y solo suya, y no la va a marcar nadie más que él.
Consérvenoslo Dios con mucha salud, sobre todo porque este hombre sin cambiar nada doctrinal ya ha conseguido en 3 semanas iniciar el camino de una reconciliación eclesial necesaria con los excluidos sectores progresistas, por no hablar de darle un empuje muy fuerte al ecumenismo. Si sigue así, será un éxito de pontificado, si va más lejos (cosa que no espero para no hacerme más ilusiones) estoy seguro que se convertirá en un pontifice inolvidable.
PD: ¿Será un Juan XXIII? No lo sé, pero es cierto que se le parece muchísimo en la cara.