Vaya éxito el post de la Lady Mierda esa. En tan poco tiempo me han llovido todas las críticas inimaginables del Facebok. Pues me reafirmo, vuestra ídolo es basura, y si me meto yo con ella es porque antes ella se metió con mis creencias religiosas.

Debe ser porque no me gusta pertenecer a un club de fans, o que me da pavor la gente que justifica lo inimaginable de sus ídolos. Hace dos años veía un ídolo llamado Zapatero y había que ver como se ponía la gente cuando lo atacabas. Hubo un ídolo abusador de niños y loco llamado Michael Jackson, y madre mía como se comportan sus fans. ¿Y qué decimos de Silvio Berlusconi? Si, ese presidente Italiano al que buena parte de Italia parece resignada a aplaudir que se acueste con jovencitas y ponga cuernos a su mujer. ¿Y si hablamos de los fans del padre Maciel? ¡Qué horror!, lo encubrieron y no dieron credibilidad a nada. ¿Y los fans de los Papas? Pues que horror ellos también, dispuestos a sustituir a Jesucristo y a colocar al papa como una figura a venerar.

No puedo rebajarme a la adoración o veneración de cualquier persona, cosa o individuo. Y menos a justificar cualquier cosa que ellos digan o hagan. A veces hay que darles la razón y otras hay que quitársela y mostrar desaprobación.

De Lady Caca ya he dicho bastante de lo que tenía que decir. Operada y reoperada para parecer guapa, y aun así tiene que usar maquillajes y pelucas. Sustituye su nombre por uno hortera, y falsea sus orígenes nada humildes por unos en los que se hace pasar por pobre. Exhibe un cuerpo como una fulana, lo cual es rebajarse a si misma como mujer y a las mujeres en general, al mostrarse ella como un objeto de deseo del machismo. Insulta a mi religión y a la de muchos millones de personas. ¿Y a pesar de esto sus fans la justifican? Por motivos similares, se justificó el acostarse con niños por parte del pederasta Michael Jackson y a la cocainómana Britney Spears. ¿Tengo que hablar bien de quien ofende mis creencias religiosas? Lo siento pero no puedo, y no la he atacado antes porque una cosa era un videoclip y otro es un ataque sistemático a mis creencias para buscar una fama gratuita que como artista le está faltando. Pues hasta hace un año, no la conocíamos aquí hasta aquel video en que se disfrazó de monja muerderosarios.

Y no me hablen de ventas de discos, que bombardeando con anuncios todo el tiempo vende cualquiera. Como la Tamara aquella del “no cambie” o el Neng que fue una creación de Antena 3.