El arte de saber recortar e ingresar dinero bien (en el transporte público).

Empiezo a dudar de la capacidad del Partido Popular para recortar gastos. Algunos gastos eran evidentísimos de recortar, otros en cambio son bastante más difíciles de hacer. Ahora se plantean hacer recortes más profundos, es decir, los recortes difíciles, y para saber recortar hay que estudiar cada sector en profundidad.

El Ayuntamiento de Madrid quiere recortar 50 millones de euros del Metro. Me parece muy loable su actitud, pero en cambio las propuestas de recortes me parecen absurdas. Dentro de un ámbito de economía sostenible, la propuesta de recortar 2 horas del servicio del metro es un disparate y una sinvergonzonería. Y quienes hacen esa propuesta solo pueden ser unos idiotas que jamás usan el metro de Madrid. Y si se recortan dos horas del metro, quiero que se le recorte el sueldo particularmente a ese idiota, para ver si así no le llega para tener coche y tiene que usar el Metro.

¿Se pueden hacer recortes en el metro? Creo que si se pueden, y una forma de hacerlo es eliminar entre el 10 % y el 20 % de los fluorescentes, pues el metro tiene un problema de sobreiluminación, y quitando unos pocos fluorescentes casi nadie notaria la diferencia y se podría ahorrar dinero. Pero también es posible ahorrar dinero con trenes cortos entre las 12:00 AM y la 1:30 AM y entre las 6 AM y las 7:30 AM. Y una forma de recaudar o prevenir el fraude, sería que los propios vigilantes del metro sean también revisores de billetes.

Una forma de ahorrar en el metro, sería suprimir bibliometro, y usar esas instalaciones para montar pequeños negocios tales como puestos de venta de panadería y bollería, prensa, chucherías, etc. Otra forma eficaz de ahorrar sería retransmitir las noticias de Telemadrid directamente en las estaciones que cuentan con televisión en el metro, y eliminar ese pésimo servicio de noticias que funciona en metro de Madrid y que a veces te presentan noticias que lo fueron hace una semana.

Pero sobre todo, la mejor medida es promocionar el uso del transporte público. Sobre todo porque en tiempos de crisis, este es la mejor medida para ayudar a paliar los bolsillos de muchas familias. El coche constituye una sangría de dinero cuando no se tiene empleo, incluso cuando se tiene y existen formas eficaces de transporte. Por ello es conveniente mentalizar del gasto que supone el coche frente al ahorro de usar transporte público. Se estima que el gasto medio de un coche al año ronda entre los 3000 € a los 7000 €, frente al transporte público que ronda entre los 564 € (suponiendo abono zona A) a los 1380 € (suponiendo zona E2).
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