Este mes hace justo un siglo. No había internet, ni etiqueta de “neo-con” para integristas. Pero ya se trepaba en el escalafón curial delatando a “socializantes”. Acusaron de “rojillos” al obispo Radini Tedeschi y a su secretario Roncalli (futuro Papa del Concilio).
En enero de 1909 funda Radini La vita diocesana, siguiendo el modelo y con la mentalidad social del cardenal Mercier. Muchos artículos, con seudónimo,eran de Roncalli.
A la ultraderecha del periodico Perseveranza le parecía sospechoso que apoyasen la huelga de trabajadores y protestaron ante Pío X porque les parecía “una bendición dada a una causa francamente socialista”.
Roncalli defendió a su obispo diciendo: “El sacerdote que vive a la luz del evangelio no puede pasar de largo por la otra acera. Cristo da preferencia a los desheredados, débiles y oprimidos”.
Cien años después es oportuno el recuerdo, en el contexto de crisis de desempleo a escala mundial y la necesidad de movilizarse contra las injusticias estructurales de las políticas económicas.