El centro-sur de Chile enfrenta una catástrofe sin presendetes por su extensión debido a los 251 focos de incendios forestales que amenzan pueblos y ciudades, varios de ellos han debido ser evacuados por las autoridades y por las instituciones de seguridad. También, cientos de compañías de bomberos del resto del país, se movilizan hasta la zona para colaborar en el rescate de personas, animales y bienes.

El Presidente Gabriel Boric suspendió sus vacaciones y ha recorrido algunos lugares afectados. Ayer decretó estado de catástrofe en tres regiones, lo que facilita que las fuerzas armadas salgan a colaborar con bomberos y policías, y tiene en terreno a cinco secretarios de estado, coordinando todas las acciones para atacar los diferentes focos incendiarios.

Campaña de Caritas

Ante la magnitud de esta catástrofe y sus graves consecuencias, Cáritas Chile convocó a una campaña solidaria que busca recaudar fondos con el fin de responder a las múltiples necesidades humanitarias que están originando los incendios, trabajando en red con organismos públicos y de la sociedad civil. Los ayuntamientos o municipios de todo el país también están recogiendo la ayuda solidaria.

Caritas Chile, a través del Programa de Medioambiente, Gestión del Riesgo y Emergencias (MAGRE), y los equipos diocesanos han estado desde el primer momento acompañando y en permanente contacto con las comunidades afectadas para ir evaluando la magnitud del desastre y los pasos a seguir, mientras los equipos especializados de Bomberos y de la Corporación Nacional Forestal combaten los incendios en curso, informó un comunicado del organismo eclesiástico.

Aseguró, también que los fondos permitirán, una vez identificadas las necesidades, contribuir en los procesos de respuesta humanitaria, recuperación y reconstrucción, incluyendo la necesaria ayuda inmediata. Se trata de acompañar, en un proceso, la recuperación de estas familias, sus bienes y medios de vida.

22 Fallecidos

En un nuevo balance entregado por el Gobierno, quedó graficada la enorme emergencia que se vive en el centro-sur del país por los mega incendios forestales que comenzaron el pasado miércoles.

De acuerdo a las cifras entregadas por la ministra de Interior, Carolina Tohá, “producto del desarrollo del incendio, tenemos consecuencias bastantes complejas y dolorosas. Van 22 personas fallecidas en un balance muy duro, 16 de ellas son de la Región del Biobío, cinco de La Araucanía y una en El Ñuble. A todas sus familias y conocidos, nuestra solidaridad y apoyo”, señaló.

“En este incendio, estamos teniendo en esta semana, una superficie quemada equivalente a la que se destruye en un año. En varias localidades de las zonas afectadas, hemos tenido temperaturas record que jamás se hayan conocido”, continuó la ministra. En efecto, las temperatura máxima en algunos lugares afectados por el fuego, han superado los 41 grados centígrados.

Según la información oficial proporcionada por el Ministerio de Interior, "hay 251 incendios, de esos, 76 se detonaron el día viernes".

Además de las 22 personas muertas, entre ellas voluntarios de Bomberos, incluida un joven bombera, hay “1.429 personas albergadas, 32 albergues funcionando, 554 personas lesionadas y de ellas, 16 son grandes quemados que están en condición gravísima que ni siquiera se pueden trasladar. Hay 15 establecimientos educacionales y dos postas alcanzadas por el fuego”.

Según lo que han informado los especialistas en el contexto de esta ctástrofe, el cambio climático y la proliferación de monocultivos de empresas forestales, con especies altamente combustibles, ha hecho que Chile sea un territorio de mucha proliferación de incendios forestales.

Utilidad económica ante todo

De esta modo, el cambio de condiciones que han sufrido los bosques chilenos ha sido el escenario más ideal para que proliferen los mega incendios forestales. Los de hoy repiten el panorama de los devastadores siniestros del año 2017, que han afectado los monocultivos que han instalado las empresas forestales, y que en esta catástrofe han sido completamente arrasadas por el fuego.

Hay que señalar que algunos incendios forstales se han originado en lugares donde hoy existen especies no nativa como el pino y el eucalipto que han proliferado en zonas donde antes existía vegetación autóctona y que rara vez era zona de incendios. Sin embargo, con el paso de los años, y la implementación de la economía neoliberal como caracteriza a Chile, estos mismos sectores han sido objeto de grandes emergencias de magnitud nacional.

«Nos estamos volviendo uno de los territorios más vulnerables a incendios, fundamentalmente por la evolución que ha tenido el cambio climático en nuestro territorio», dijo en conferencia de prensa la ministra de Interior, Carolina Tohá.

Además, ella aseveró que «se han tomado ya contacto con varios gobiernos para reforzar las gestiones que se venían haciendo previamente con las compañías que proveen de servicio. Estas solicitudes incluyen la búsqueda de naves para reforzar la flota y también de brigadas que puedan reforzar el trabajo en el terreno».

Parta contribuir solidariamente vía Caritas Chile, la información para donaciones es la siguiente:

Los datos para sumarse y aportar son:

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Banco de Chile
Titular: Caritas Chile
RUT: 70.020.800-1
Correo: comunicacion@caritaschile.org