Con el espíritu de comunión y participación, y el incentivo y apoyo al mundo laical, con respeto y cuidado por la dignidad de las personas que caracteriza el proyecto de Iglesia sinodal del Papa Francisco, ha sido nombrado obispo el religioso mercedario Mario Salas Becerra. Será obispo auxiliar de Valparaíso, una de las diócesis más importantes del país y cercana a Santiago.

Hasta ahora, Mario Salas ha ejercido como Superior Provincial de los Mercedarios en Chile y Angola, además de presidir la Conferencia de Religiosas y Religiosos de Chile (Conferre). En este ámbito, Salas es reconocido con afecto por integrantes de diferentes congregaciones.

Su nombramiento se inscribe en un momento clave para la Iglesia, que busca avanzar hacia una mayor sinodalidad, cuya segunda asamblea del Sínodo, en octubre venidero, será un factor determinante. En su nuevo rol, el ahora obispo Mario Salas aportará su experiencia y carisma, pues en su trayectoria ha contribuido a promover una Iglesia de puertas abiertas, cercana a los más vulnerables y comprometida con la justicia y la paz.

Su rectitud, coherencia y compromiso en el acompañamiento a víctimas de abusos clericales son otras de sus características personales. Además de tener un diplomado especializado en el tema, ha participado activamente en el Consejo Nacional de Prevención de Abusos de la Conferencia Episcopal.

Como técnico electromecánico, estudios que cursó cuando joven, habla de su apoyo concreto y operativo para “arreglar problemas”. Pero también estudió Pedagogía en Religión Básica del Instituto Hogar Catequístico de Santiago, Diplomado en Acompañamiento Psicoespiritual en la Universidad Alberto Hurtado, y es Licenciado en Ciencias Religiosas, de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Todo esto habla de su estilo cercano y metódico en el ejercicio del ministerio, durante el cual ha desempeñado funciones clave tanto en la formación de nuevos religiosos como en gestión pastoral.

En un mensaje preliminar dirigido a las comunidades de esta diócesis, pidió oraciones y expresó: “Le pido al Señor Jesús que me ayude y me enseñe a ser un buen pastor al servicio de mis hermanos y hermanas, especialmente a los que sufren”.

Salas será obispo auxiliar de Valparaíso, una diócesis que le es conocida, pues como religioso vivió en comunidades mercedarias de la misma ciudad-puerto y en la comuna de Quillota.

Valparaíso tiene como titular, desde junio de 2021, a Jorge Patricio Vega, religioso del Verbo Divino, quien provenía como obispo de la Prelatura de Illapel, ubicada en la misma región de Valparaíso. El último integrante del clero diocesano que surgió de esta zona geográfica fue Gonzalo Bravo, nombrado obispo de San Felipe en 2020, en plena pandemia.