El Papa quiere preservar la unidad "Querida Amazonía", una hija directa de Laudato si'
En su nueva exhortación apostólica, Francisco confirma el carácter integral de su visión social-ecológica-pastoral, y convierte al texto publicado este miércoles en una hija directa de su encíclica de 2015
La exhortación post sinodal ofrece una vasta mirada de Jorge Bergoglio sobre la poliédrica realidad del pulmón verde sudamericano que integran nueve países
"El asunto es promover la Amazonia, pero esto no implica colonizarla culturalmente sino ayudar a que ella misma saque lo mejor de sí"
"El asunto es promover la Amazonia, pero esto no implica colonizarla culturalmente sino ayudar a que ella misma saque lo mejor de sí"
Hernán Reyes Alcaide, corresponsal en el Vaticano
Una de las primeras reflexiones tras la lectura de "Querida Amazonía"; publicada hoy por el Vaticano, es la confirmación de la mirada integral que el papa Francisco tiene sobre la denominada cuestión ambiental, y que ya había revolucionado al mundo casi cinco años atrás con Laudato si'.
La exhortación post sinodal ofrece una vasta mirada de Jorge Bergoglio sobre la poliédrica realidad del pulmón verde sudamericano que integran nueve países. Y vuelve a poner de manifiesto la sagacidad del pontífice (el primero sudamericano de la historia, recordemos) para identificar e interpretar las interconexiones que existen entre temas que hasta hace poco se estudiaban siempre por separado.
Así, en una de las primeras definiciones en las que enmarca esa mirada integral, superadora de los ambientalismos puritanos al estilo Greenpeace de lo que ya se puede denominar "la era pre-Laudato", Francisco afirma que si bien "la Amazonia enfrenta un desastre ecológico, no nos sirve un conservacionismo que se preocupa del bioma pero ignora a los pueblos amazónicos".
Ese constante pivoteo entre lo social, lo ambiental, lo humanitario y lo eclesiástico es una de las riquezas más grandes de la nueva exhortación.
Así, de cara a los retos que afronta la región, el Papa asegura que "se pueden buscar alternativas de ganadería y agricultura sostenibles, de energías que no contaminen, de fuentes dignas de trabajo que no impliquen la destrucción del medioambiente y de las culturas" para lo que reclama "astucia y capacidad" a los políticos.
Y no sorprende que en esos contextos hile directo entre los movimientos migratorios que produce el neo extractivismo con la proliferación de las nuevas formas de esclavitud que aparecen en la zona.
Intereses colonizadores
Tras criticar los "intereses colonizadores" en el área, sostiene Bergoglio que "esto alentó los movimientos migratorios más recientes de los indígenas hacia las periferias de las ciudades. Allí no encuentran una real liberación de sus dramas sino las peores formas de
esclavitud, de sometimiento y miseria".Renueva también el Papa su crítica y rechazo a los falsos paternalismos, una postura que ha caracterizado su pontificado.
"El asunto es promover la Amazonia, pero esto no implica colonizarla culturalmente sino ayudar a que ella misma saque lo mejor de sí", plantea en esa dirección.
Autodeterminación de la Amazonía
"Quienes observamos desde afuera deberíamos evitar generalizaciones injustas, discursos simplistas o conclusiones hechas sólo a partir de nuestras propias estructuras mentales y experiencias", agrega luego, en un discurso que apunta directo a mantener la autodeterminación de los más de 100 pueblos que se mantienen en aislamiento voluntario.
Es recién sobre el final, en los últimos "sueños" que el Papa plantea para su "Querida Amazonía", cuando a toda la integralidad socio-económico-geográfica Francisco le añade la dimensión pastoral.
"La auténtica opción por los más pobres y olvidados, al mismo tiempo que nos mueve a liberarlos de la miseria material y a defender sus derechos, implica proponerles la amistad con el Señor que los promueve y dignifica", plantea, para iniciar un pedido sostenido y justificado de esa "Iglesia en salida" que reclama casi como una hoja de ruta desde la Evangelii Gaudium de 2013.
Esa integralidad la aplica también Francisco a su reflexión sobre la falta de sacerdotes en la región, en una salida superadora al debate de las últimas semanas que, con mirada poco integral, había convertido el tema en un blanco contra negro de "ordenación de viri probati sí o no".
Estudiar todo sin descuidar detalles
Con reminiscencias de Guardini y su "oposición polar", el Papa no cae en una dialéctica hegeliana que genere síntesis que terminen negando algunas de las posiciones antitéticas, sino que estructura su posición en un llamado a estudiar el todo sin descuidar los detalles: a preservar la unidad, podría decirse, como plantea el corazón de las posturas del filósofo alemán.
Para el Papa, "no se trata sólo de facilitar una mayor presencia de ministros ordenados que puedan celebrar la Eucaristía". Ve así Francisco la complejidad de un tema y la solución pírrica que podría haber sido analizar coom posible solución al tema la ampliación numérica de los ministros ordenados.
No es menor en esa dirección la sentencia de la cita al pie 132: "Llama la atención que en algunos países de la cuenca amazónica hay más misioneros para Europa o para Estados Unidos que para auxiliar a los propios Vicariatos de la Amazonia".
"Conviene revisar a fondo la estructura y el contenido tanto de la formación inicial como de la formación permanente de los presbíteros, para que adquieran las actitudes y capacidades que requiere el diálogo con las culturas amazónicas", agrega a ese planteo en otro pasaje de la exhortación.