Lección de valores en un escenario clave de la historia

Esta cuna de héroes, este altar sagrado de la patria, es nuestro origen, nuestro espíritu, nuestra alma. Lo dijo Plácido Domingo al recitar en una tarde llena de emociones.

En un escenario único, presidido por el Moncayo, el tenor universal homenajeó a Numancia la invicta, Numancia la resistencia, Numancia la independencia, Numancia la paz, Numancia la libertad.

En un acto lleno de simbolismo y patriotismo rindió homenaje a los 22 siglos de historia de la heroica ciudad; al primer pueblo de Europa que murió por la libertad.

Lo hizo con versos de “La Numancia” de Miguel de Cervantes, paradigma, de la defensa del valor de la libertad.

El acto terminó cantando el “Himno de la Alegría”, que la Unión Europea ha hecho suyo.

Es cierto que, para mucha gente, Soria casi ni existe. Que muchos no saben donde está Numancia ni que ocurrió allí. Pero aun así es lamentable que este acto haya pasado desapercibido para la inmensa mayoría de medios de comunicación.

¡Qué pena! Porque habría sido una magnífica lección de historia. Una oportunidad para aportar un granito de arena a ese mundo mejor que queremos forjar. Para valorar lo que vale de verdad: raíces, dignidad, unidad, verdad, libertad, paz, solidaridad…
Volver arriba