Esta mañana, los tertulianos decían: Puede que haya oportunidades, pero lo realmente importante es la suerte, el talento y el trabajo. Bueno, a lo que unos llaman oportunidad, otros le llaman suerte. No hay talento que brille sin trabajo. Muchos talentos insatisfechos por falta de esfuerzo han caído en la drogadicción hasta terminar convertidos en verdaderos guiñapos humanos. Los resultados del trabajo sin talento, a no ser un ejemplo de constancia y tenacidad, suelen ser menguados pero suficientes para una vida digna y placida si la falta de inteligencia no va acompañada de la avaricia. Si ocurre lo contrario, el resultado será personajes ridículos, hazme reír de todo el mundo. Es importante aprovechar y subirse al primer tren que pasa delante de la puerta. Sin duda, pero ocurre con frecuencias que el tren más rápido, puede que único, no pasé delante de tu puerta, sino que haya que salir a cogerlo a alguna estación que puede estar cerca, a medio camino o muy lejos.