El obispo de Solsona admite que, "guste o no, se acabaron las elecciones plebiscitarias" Novell, ante las catalanas: "Un católico coherente no puede votar por ERC y el PSC"
Arremete contra "las derechas, liberales o populistas, que guiñan el ojo al catolicismo con alguna oposición táctica a las 'leyes de la muerte'" y contra "las izquierdas incapaces de proponer una verdadera alternativa a una sociedad llena de desigualdades y una economía injusta e insolidaria se refugian en la defensa y la promoción de los mal llamados 'nuevos derechos' -aborto, eutanasia, cambio de sexo, matrimonio homosexual...-"
El obispo de Solsona, Xavier Novell, propugna en su carta pastoral del próximo domingo que los democratacristianos se presenten en solitario en Cataluña a las próximas autonómicas y lamenta que se hayan diseminado entre PSC y ERC, partidos que cree no defienden las ideas y convicciones católicas.
Bajo el título de "¿A quién votaremos?", el obispo de Solsona explica a sus feligreses en su carta dominical que "vuelven las elecciones al Parlament de Catalunya" y dice que "guste o no, se acabaron las elecciones plebiscitarias y coaliciones que generaban".
"Ahora, los ciudadanos, sin abandonar el bloque unionista o independentista, tendremos que priorizar el partido político que defiende las ideas y los proyectos que se corresponden con nuestras convicciones. ¡He aquí el problema para los católicos! ¿A quién votaremos?", se pregunta el prelado.
"Ningún partido asume las convicciones del catolicismo"
Según Novell, "no hay ningún partido del actual arco parlamentario, ni en el bloque independentista ni en el unionista, que asuma de manera más o menos completa las convicciones morales sobre la vida, las relaciones sociales y económicas propias del catolicismo".
"La democracia cristiana, que nunca ha osado presentarse en solitario en Cataluña, está difuminada en el grupo socialista y en el de Esquerra Republicana. Y todos sabemos qué han votado estos partidos con motivo de la ley de regulación de la eutanasia", ha escrito el obispo.
Por eso, propugna que los demócrata cristianos "se arriesguen a presentarse en solitario y propongan un programa electoral" acorde con las convicciones católicas.
Entre estas convicciones destaca "una economía que ponga por delante la persona, lejos del neoliberalismo que no para de generar injusticias y descartes sociales; la vida desde la concepción hasta la muerte natural; la libertad religiosa; el derecho de los padres a elegir la educación de sus hijos y los derechos de los pueblos".
Un partido demócrata cristiano
Según Novell, también entran dentro de las propuestas católicas que debería defender un partido demócrata cristiano "unas relaciones sociales de acuerdo con la 'Fratelli tutti', lejos del egoísmo, el abuso, la explotación y la exclusión; la antropología cristiana ante la ideología de género; y la familia formada por marido, mujer e hijos".
El obispo critica que "las izquierdas incapaces de proponer una verdadera alternativa a una sociedad llena de desigualdades y una economía injusta e insolidaria se refugian en la defensa y la promoción de los mal llamados 'nuevos derechos' -aborto, eutanasia, cambio de sexo, matrimonio homosexual...-".
"Han renunciado -añade- a la igualdad y la fraternidad y han idolatrado una libertad que ignora la verdad de la persona y la deja a merced de esclavitudes y egoísmos destructivos".
Derechas populistas y leyes de la muerte
También arremete contra "las derechas, liberales o populistas, que guiñan el ojo al catolicismo con alguna oposición táctica a las 'leyes de la muerte', pero, como les espetaron en el último debate parlamentario, cuando pueden cambiarlas no lo hacen y, más adelante, las promueven".
"Son liberales no solo en lo económico, sino en lo moral o simplemente mutan de ideología para conseguir el poder", abunda en sus reproches el obispo.
Según Novell, "un católico coherente no puede votar ninguno de estos partidos salvo que, no habiendo ninguna alternativa, tenga que optar por el mal menor".
"Si los partidos democratacristianos -el independentista y el unionista porque está claro que los votantes, antes que cambiar de bloque, se abstendrán- no se arriesgan a presentarse con un programa compatible con las convicciones católicas, ¿a quién votaremos?", concluye el obispo de Solsona.