No como nosotros, que no acertamos y no sabemos qué decir.

Confíale a la Madre todo, todo, Para que desate todos los nudos que te agobian

Si en ello crees, ¡qué alegría tendrás!

Y después de ello, ¡Serás totalmente libre! ¡Qué liberación!

¡Cómo es posible amar a tu madre con tu corazón!

Con tu razón hablarle, darle todo lo que te pida.

Escucharle con lo que me dices nada es posible…

Pero con la Confianza que tienes

Ya todo lo que te conviene lo has recibido

- La Confianza te la dio cuando naciste,

 para luego aprender a pedirle,
Y así creyendo lo que pediste,

verás que recibiste lo que de tu corazón ya intuiste-

Porque eres hijo de María- Y contigo está.

Cree en ella, los que creen descansan,
Los que se agobian en su Confianza se hacen enredadera
Y por dónde pasan hacen maleza.

Confíale a la madre Todo, todo. Todo lo que viene de tu corazón
Lo que no conviene a tu corazón No te responderá.

Ejercítate en el gimnasio de su escuela divina, una y otra vez

Llegará el día en que la Confianza total será tuya

Y todo lo que hagas te saldrá bien.

Eres hijo de tu Madre, no del mundo.

Eres luz de sus ojos para
ser transparencia suya, Carne de su carne, siendo rostro y corazón de todos

Para con todos ser hermanos de la gran Fraternidad Universal.