ENCUENTROS LIBERADORES DE JESÚS DE NAZARET
ENCUENTROS LIBERADORES DE JESÚS DE NAZARET
El encuentro de Jesús con los enfermos y marginados debe ser siempre para la Iglesia el modelo de conducta para todos los que creemos en la presencia liberadora y redentora de Jesucristo resucitado.
Medita brevemente algunos pasajes evangélicos donde se narran el encuentro de Jesús con los enfermos.
1.-“Se marchó de allí y fue a la sinagoga de ellos. Había allí un hombre con un brazo atrofiado; para poder acusar a Jesús, le preguntaron: ¿Está permitido curar en sábado? El les respondió: “supongamos que uno de vosotros tiene una oveja, y que un sábado se la cae en una zanja, ¿la agarra y la saca o no? Pues ¡Cuánto más vale un hombre que una oveja! Por tanto, está permitido hacer el bien en sábado”. Entonces le dijo al hombre: “Extiende el brazo. Lo extendió y quedó sano y normal como el otro” (Mt 12,9-14s).
2.-“Terminada la travesía atracaron en Genesaret. Los hombres del lugar, al reconocerlo, avisaron por toda la comarca, y le llevaron los enfermos, rogándoles que les dejara tocar siquiera el borde de su mano, y todos los que lo tocaron se curaron” (Mt 14,34-36).
3.-“Al salir de Jericó lo siguió mucha gente. Había dos ciegos, sentados a la vera del camino, y al oír que pasaba Jesús, se pusieron a gritar: “¡Ten compasión de nosotros, Señor, Hijo de David! La gente les regañaba para que se callaran, pero ellos gritaban más fuerte: “¡Ten compasión de nosotros, Señor, Hijo de David!”. Jesús se detuvo, los llamó y le dijo: “¿Qué queréis que haga por vosotros?” Le contestaron ellos: “Señor, que se nos abra los ojos”. Jesús sintió lástima y les tocó los ojos, al momento recobraron la vista y los siguieron” (Mt 20,29-34).
4.-“Al salir de la sinagoga se fueron derechos a casa de Simón y Andrés llevando a Santiago y a Juan. La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, y se lo dijeron en seguida. Jesús se acercó, la cogió de la mano y la levantó. Se le pasó la fiebre y les estuvo sirviendo” (Mc 1,29-31).
5.-“Al bajar del monte, le siguió una gran muchedumbre, y acercándosele un leproso, se postró ante El, diciendo: Señor, si quieres puedes limpiarme. El, extendiendo la mano, le tocó y dijo: Quiero, sé limpio. Y al instante quedó limpio de su lepra. Jesús le advirtió: Mira, no lo digas a nadie, sino ve a mostrarte al sacerdote y ofrece la ofrenda la ofrenda que Moisés mandó, para que les sirva de testimonio” (Mt 8,1-4).
6.-“Estaba un sábado enseñando en una sinagoga, y había una mujer a la que un espíritu tenía enferma hacía dieciocho años; estaba encorvada, y no podía en modo alguno enderezarse. Al verla Jesús, la llamó y le dijo: “Mujer, quedas libre de tu enfermedad”. Y le impuso las manos. Y al instante se enderezó, y glorificaba a Dios” (Lc 13,10-13).
www.marinaveracruz.net
El encuentro de Jesús con los enfermos y marginados debe ser siempre para la Iglesia el modelo de conducta para todos los que creemos en la presencia liberadora y redentora de Jesucristo resucitado.
Medita brevemente algunos pasajes evangélicos donde se narran el encuentro de Jesús con los enfermos.
1.-“Se marchó de allí y fue a la sinagoga de ellos. Había allí un hombre con un brazo atrofiado; para poder acusar a Jesús, le preguntaron: ¿Está permitido curar en sábado? El les respondió: “supongamos que uno de vosotros tiene una oveja, y que un sábado se la cae en una zanja, ¿la agarra y la saca o no? Pues ¡Cuánto más vale un hombre que una oveja! Por tanto, está permitido hacer el bien en sábado”. Entonces le dijo al hombre: “Extiende el brazo. Lo extendió y quedó sano y normal como el otro” (Mt 12,9-14s).
2.-“Terminada la travesía atracaron en Genesaret. Los hombres del lugar, al reconocerlo, avisaron por toda la comarca, y le llevaron los enfermos, rogándoles que les dejara tocar siquiera el borde de su mano, y todos los que lo tocaron se curaron” (Mt 14,34-36).
3.-“Al salir de Jericó lo siguió mucha gente. Había dos ciegos, sentados a la vera del camino, y al oír que pasaba Jesús, se pusieron a gritar: “¡Ten compasión de nosotros, Señor, Hijo de David! La gente les regañaba para que se callaran, pero ellos gritaban más fuerte: “¡Ten compasión de nosotros, Señor, Hijo de David!”. Jesús se detuvo, los llamó y le dijo: “¿Qué queréis que haga por vosotros?” Le contestaron ellos: “Señor, que se nos abra los ojos”. Jesús sintió lástima y les tocó los ojos, al momento recobraron la vista y los siguieron” (Mt 20,29-34).
4.-“Al salir de la sinagoga se fueron derechos a casa de Simón y Andrés llevando a Santiago y a Juan. La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, y se lo dijeron en seguida. Jesús se acercó, la cogió de la mano y la levantó. Se le pasó la fiebre y les estuvo sirviendo” (Mc 1,29-31).
5.-“Al bajar del monte, le siguió una gran muchedumbre, y acercándosele un leproso, se postró ante El, diciendo: Señor, si quieres puedes limpiarme. El, extendiendo la mano, le tocó y dijo: Quiero, sé limpio. Y al instante quedó limpio de su lepra. Jesús le advirtió: Mira, no lo digas a nadie, sino ve a mostrarte al sacerdote y ofrece la ofrenda la ofrenda que Moisés mandó, para que les sirva de testimonio” (Mt 8,1-4).
6.-“Estaba un sábado enseñando en una sinagoga, y había una mujer a la que un espíritu tenía enferma hacía dieciocho años; estaba encorvada, y no podía en modo alguno enderezarse. Al verla Jesús, la llamó y le dijo: “Mujer, quedas libre de tu enfermedad”. Y le impuso las manos. Y al instante se enderezó, y glorificaba a Dios” (Lc 13,10-13).
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