No tratar de corregir lo que puede y debe ser corregido es una verdadera frustración y mal en la vida de cada persona.
Cada día amanece para que la vida se convierta en una oportunidad para llegar a la perfección, a la madurez humana y al conocimiento pleno de la realidad.
Descubre por ti mismo que lo importante no es caerse sino levantarse, no es pecar sino arrepentirse, no es herir sino curar, no es molestar sino pedir perdón.