RISUS PASCHALIS – 8  Lugares, pliegos, músicas.

Sobrepasado con creces el tiempo vacacional de Navidad, no es cuestión de seguir haciendo tesis doctorales sobre el mismo tema que puede cansar a quien sólo busca un rato de distracción cultural con historias de tono menor o un estímulo para reafirmar su fe cuando ésta se siente sacudida.

Así que… seguiremos con algún otro tema que se nos cruce por el camino, haciendo bueno el final de una de las Ensaladas de Mateo Flecha: “No nos cansemos, con placer cantemos”.

Los villancicos contenidos en pliegos de la Biblioteca Nacional son conocidos por estar catalogados. Sin embargo no todos los de las catedrales de España o América, amén de otras iglesias importantes lo están. No olvidemos que durante tres siglos o más, conventos, catedrales o iglesias encargaban textos y música  a letristas y compositores de renombre para la celebración navideña, todo por mantener una costumbre de gran arraigo en la Península.

Entre las que poseen fondos documentales catalogados de villancicos se encuentran las catedrales o iglesias de Santiago, Granada, Huesca, Valladolid, Lérida, Mataró, Madrid, Toledo, Alcalá de Henares, Sevilla, Baeza, Lorca, Málaga, Cádiz, Zafra, Daroca, Antequera y Puerto de Santa María.

Se habla de villancicos pero doy por supuesto lo que todos que han estudiado literatura saben,  cual es que el género “villancico” no es algo referido únicamente a la Navidad. Villancico era una forma estrófica de componer de estructura general ABbACcADdA. Es decir, un estribillo al que siguen coplas, ambos en versos de arte menor. Musicalmente las coplas se repiten y a veces con un añadido en la copla que repite la melodía del estribillo. El contenido literario solía ser profano, amoroso generalmente.

Así pues, el villancico se puede denominar, por su contenido, cortesano o religioso, aunque estos de Navidad unen lo cortesano y lo religioso en una simbiosis que provoca “risus”.  Pero una característica común a todos es que se escribían para ser cantados y para ser también representados, sobre todo en estas fechas. Gozaron de tal prestancia y estima que en algunas ocasiones llegaron a suplantar preces de tanta raigambre litúrgica como graduales, ofertorios o responsorios. Una forma de sacudirse la tiranía de lo incomprendido, el latín.

En los villancicos navideños todo giraba, como es natural, en torno al Niño Jesús y el Pesebre. Allí acudían pastores y pastoras, zagales y todo un séquito variopinto de personajes. Haciendo recuento de los que tengo a mano, en ellos aparecen reyes, buhoneros, dueñas, beatas, gallegos, asturianos, catalanes, vascos, gitanos y gitanas bailarinas, portugueses, guineos (negros), franceses, vendedores ambulantes, doctores bufonescos…

Y cada uno, con su lenguaje característico, decía u ofrecía lo que tenía: hacían juegos, proponían adivinanzas, sacaban a relucir temas un tanto equívocos e incluso escabrosos, bailaban, tocaban instrumentos o simplemente saltaban.  No hay problema en enlazar chistes vulgares con misterios de la Redención. Un ejemplo. Toledo, 1708. Villancico VIII:

--¿Pastores? --¿Pastoras? --¿Zagalas? --¿Zagales? / Vaya de gira, placer y donaire / y un juego se forme / de chistes vulgares / Que en ‘trage’ de burlas / misterios ‘enlazen’

Pero hay momentos en que desbordan no sólo el asunto que se canta, el Nacimiento, sino incluso el buen gusto. Es el caso de los villancicos cantados en las Descalzas Reales en 1696, que consta de ocho villancicos y uno para la adoración. El Villancico II comienza de esta guisa:

Una Vieja, con la habla en Tembleque – los dientes en Jauja y el juicio allá en Túnez

Como rábano trae las narices / medio amoratadas, amuscas y azules. El Coro, en las coplas repite una y otra vez: Muérase tía – [ella] No quiero, ea – Muérase, muérase, muérase, vieja.

En el Villancico V las zagalas organizan una Rifa y lo que rifan es… La alhaja intentan que sea / el Buey, y no es cosa ‘estraña’ / ‘Aya’ fiesta con el manso / que es bravo si se desata. Y siguen páginas de coplas rifando al buey.

El Villancico VI recrea un “juego de cañas”, que se solía hacer en plazas donde se celebraban corridas de toros. El Pesebre se convierte en plaza. Es lo mismo que la  ensalada “La Guerra” de Mateo Flecha el Viejo siglo y medio antes [Consultar el complejo ceremonial que regía los “juegos de cañas”]. Suenan clarines y timbales, el Niño ocupa el ‘valcón’ del Pesebre; sale el Padrino; salen los Lacayos; salen las cuadrillas, la de Rosa, la de Cisne, la del Alhelí, la de la Vara florida, la de Malva

En el Villancico VII le piden a Bartolo que diga “donayres”. Uno de esos donaires: Que el dormir en los Maytines – es cosa muy saludable. Añadiendo …entre burlas y entre veras – he de dezir las verdades. Por ejemplo, en las coplas, verdades como puyazos:

Dos brutos en cabeçera – estaban, que en Casas grandes / los más bien acomodados / son siempre los animales. La Mula, muy a lo Dama / haziendo como otras hazen / a medio vestir, pedía / la labor no, el chocolate. El Buey, entre sí dezía: / ¿qué mucho que yo me ensanche / con este Niño, pues ellas / se ensanchan con sacristanes?

Una de las portadas de la serie de villancicos de la Catedral de Huesca:

VILLANCICOS / QUE SE CANTARON LA NOCHE / DE NAVIDAD EN LA SANTA IGLESIA / CATEDRAL DE HUESCA / ESTE AÑO DE 1661. Dedicados a los muy Ilustres Señores Deán y Cabildo de dicha Santa Iglesia. SIENDO MAESTRO DE CAPILLA EL RACIONERO / LUIS GARGALLO.

El Villancico V comienza con una danza, Villano cuyo original decía: Al villano se la dan/la cebolla con el pan. Contrafactum: Al villano se lo dan / entre paja el blanco pan]. Y van desfilando un francés, un portugués, un vizcaíno, un gallego y un negro.

Hemos citado la danza, el Villano. Dado que las letras de las danzas originales eran conocidas por todos, no hacía falta indicar con qué “tono” se habían de interpretar los nuevos textos, que eran “contrafacta” de los originales. Así, se sabe que se cantaba y bailaba al son de de danzas variadas. Por citar las más corrientes en el Renacimiento: chacona, pavana, gaita, zarambeque, fandango, folía, jácaras, canario, moresca, basse danse, gallarda, volta, tourdion, zarabanda, bolero, seguidillay puede que alguna otra.

Finis coronat opus.

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