Es un deber de la Iglesia rezar por los difuntos. Por todos los que han muerto, sean quienes sean. Y por eso, el día 13 de julio de 2020, en la parroquia de San Josemaría Escrivá de Balaguer de València, se celebró un funeral por el señor Juan Cotino, expresidente de las Corts Valencianes, exconseller de la Generalitat del País Valenciano y ex director de la Policía española, entre otros cargos que tuvo durante los gobiernos del PP y que murió el 13 de abril de 2020.

El funeral, presidido por el que fue arzobispo de València, Antonio Cañizares, acompañado de dos de sus obispos auxiliares, Esteban Escudero y Vicente Juan, quería recordar en la oración al señor Juan Cotino, del cual el arzobispo Cañizares, en la su Carta semanal del 19 de abril de 2020, decía que había querido “tantísimo” y que “tantísimo me ha ayudado con su sabiduría cristiana”.

El cardenal Cañizares en aquella carta del 19 de abril de 2020, definía al señor Cotino como “un hombre de fe hasta las raíces más hondas de su corazón, que vivía de la fe, un cristiano de una pieza, un “santo” (me ha dicho de él esta mañana un testimonio vivo y muy directo suyo)”. El cardenal Cañizares afirmaba del señor Cotino que había sido “un mártir de la fe”, como le había dicho un conocido del arzobispo “y que como tal, ha muerto víctima de la persecución desatada contra su persona, por ser, en el fondo, un hombre de Iglesia, una víctima de ese mundo tan viscoso de tramas políticas tan oscuras o injustas, un hombre comprometido con la política desde joven por su fe”.

Cañizares: "Un apóstol incansable"

El cardenal Cañizares decía aún, que Juan Cotino había sido “un apóstol incansable para tiempos nuevos, un hombre bueno de verdad”. Y por eso el cardenal Cañizares afirmaba que con la muerte del señor Cotino, “Dios lo ha librado de una presunta condena por algo injusto que se pretendía contra él y Dios se lo ha llevado antes con Él”. De aquí que, el que fue arzobispo de València dijese: “¡Qué bueno, misericordioso y compasivo es Dios!”, por el hecho que, según el arzobispo, Dios había liberado al señor Cotino de ser condenado por la justicia.

Recuerdo que ante estas palabras elogiosas del arzobispo Cañizares por el señor Juan Cotino, el Grup Cristià del Dissabte dio a conocer un comunicado, en el que mostraba su preocupación por “las palabras del arzobispo, que podían mostrar una falsa imagen de Dios y de lo que significa ser verdaderamente cristiano”. Los miembros del Grup Cristià del Dissabte decían que el arzobispo Cañizares (con su elogio al señor Cotino) había hecho un “pobre favor a la convivencia y al Estado de Derecho”, ya que “suponer que Dios (con la muerte de Juan Cotino) lo había liberado de una presunta condena por algo injusto que se pretendía contra él, liberándolo de la prisión”, lanzaba “una sombra infundada sobre la acusación de los jueces en asuntos que están sub judice”.

Además, como decía el Grup Cristià del Dissabte, “reconocer mártir de la fe al máximo responsable del comité organizador de la visita del papa Benedicto XVI para el Encuentro Mundial de las Familias, no es hacer ningún servicio a la Iglesia”.

Pero ahora (Levante, 16 de abril de 2024), con las declaraciones de los sobrinos del señor Cotino, en el juicio por el caso Erial, nos hemos enterado que “su tío amañó el contrato de las ITV para Sedesa”. Con lo cual, de “mártir de la fe” y  de que “Dios lo había librado de una presunta condena por algo injusto que se pretendía contra él, liberándolo de la prisión”, nada de nada.

Hace cuatro años me sorprendió desagradablemente la defensa tan rotunda que el arzobispo Cañizares hizo del señor Juan Cotino. Y es que la connivencia de Cañizares con el PP era más que notoria.

Con todo, ya no será posible poner una fecha en el santoral para poder celebrar la fiesta del mártir Juan Cotino.