De hecho, se trata de una celebración que por años ha sido un hito en las Pastorales Juveniles en las diócesis y movimientos, donde miles de jóvenes se reúnen a celebrar la Vigilia, reflexionando sobre el Espíritu Santo y orando para que los ilumine y acompañe en sus vidas.
"No están solos y nuestro Señor los acompaña"
El sacerdote Pablo Valladares, Asesor Nacional de esta pastoral, señala su esperanza de hacerles llegar con este mensaje unas palabras de ánimo a todos los jóvenes que en este tiempo no la han pasado muy bien.
Además, el Asesor Nacional para la Pastoral Juvenil añade: “Esta fiesta tiene una fuerza juvenil en sí misma, ya que también se ve unida al proceso que muchos jóvenes viven en su preparación hacia la confirmación. Es por eso que en esta fecha vemos un momento importante, para motivar e incentivar a los jóvenes a que se dejen impregnar por la fuerza del Espíritu Santo y así transformar la sociedad al estilo de Jesucristo”.