Los de siempre siguen protestando (II)
Y antes de terminar con sus nombres contestar a una memez que de cuando en cuando se le ocurre a alguno. Mi edad será la que sea, en estos momentos 68 años. Pero ello no es óbice para que no pueda decir cual es la de otros y si es avanzada o no. Un cojo no está incapacitado para reconocer la cojera de otro. Un negro puede perfectamente decir que otra persona es de esa raza. Y un jubilado podrá señalar en potro esa condición. Lo importante es ser cojo y no que sea otro cojo quien se lo señale, o negro, independientemente de que sea de ese color quien lo reconozca, o jubilado, aunque otro en esa situación sea quien lo ponga de manifiesto.
Yo me puedo morir antes que Díez Alegría pero si digo que él tiene 98 años y que es un anciano, que los tiene y que lo es, no tiene nada que ver con los años que tenga yo sino con los que tiene él. Pues la inmensa mayoría de estos dinosaurios son mayorcísimos independientemente de que yo también lo sea. Una excursión del INSERSO es un conjunto de personas de menos edad media que los firmantes de este tipo de escritos. Ya sé que eso os molesta mucho a algunos. Pero es así. Son el INSERSO teológico. Por eso les llamo dinosaurios. Porque están en vías de extinción.
Quintín García González es un dominico a quien molestan los mártires de 1936, autor de un artículo muy sacerdotal cuyo título lo dice todo: "Obispos ante las elecciones: Mejor huérfanos".
Joaquín García Roca, Ximo para los amigos presentaba una ponencia en 1985 en el Congreso de la Juan XXIII, con otros nueve "teólogos" pedía perdón en 1999 por la "implicación evidente" de la Iglesia en la guerra civil y con otros 39 firmaba en 1999 un escrito contra la Ad tuendam fidem y reclamaba el sacerdocio femenino.
Enrique Gómez Rodríguez no sé si será un sacerdote de la diócesis de Plasenciaque en 1976 protestaba por el nombramiento como obispo de esa diócesis de monseñor Vilaplana Molina. Pues si lo es ya tiene 33 años más.
José Ignacio González Faus es un jesuita que cumple este año, o ha cumplido ya, 76 años y que parece decidido a no jubilarse de la protesta. Es de las figuras más conocidas e importantes de la contestación eclesial y sería interminable reseñar todas sus hazañas en ese campo.
Jesús Lanao Clavera tal vez sea el Jesús Lanao que en 1975 se solidarizaba con Díez Alegría en contra de sus superiores.
Julio Lois Fernández cumplió 74 años el 23 de enero es el actual presidente de la Juan XXIII y conocidísimo de la contestación eclesial. De los que también se podría escribir un libro.
María Teresa Marone Borbón debe ser una conocidísima teóloga mucho más afamada por sus saberes que por ser nieta de Alfonso XIII. Su nombre entre todo el rojerío eclesial no me extraña pues no tengo muy buen concepto del catolicismo de esa familia. ¿Es madre o tía del famoso conde Lequio? Años, sin duda, debe tener unos cuantos.
Juan Masiá Clavel, también jesuita, es sobradamente conocido en estas páginas por su Blog. Cuidado que hay puntos filipinos en esta relación pues seguramente ninguno sostiene con tanta reiteración doctrinas tan arriscadas como las de Masiá. O por ahí se andará con Tamayo. Pero este es un cura secularizado y Masiá un jesuita en activo.
Mañana concluimos