“Si alguien tiene que irse es quién es responsable de que miles de niños hayan ya atravesado la frontera de la desnutrición severa. Si alguien tiene que irse es quién es responsable de que haya miles de venezolanos hurgando en la basura buscando un desperdicio para saciar el hambre. Si alguien tiene que irse es quién es responsable de la corrupción que condena a los enfermos a morir de mengua, por falta de atención en los hospitales, insumos médicos y medicamentos. Si alguien tiene que irse de Venezuela es quien está empeñado en pisotear la dignidad de los venezolanos, al pretender convertirnos en mendigos y pordioseros, dependiendo sólo de las dádivas que ocasionalmente y clientelarmente nos ofrezcan”.
Son palabras literales del Arzobispo de Barquisimeto, en la homilía que ha pronunciado hoy, martes, 15 de mayo, en Misa. ¿Dónde está el Arzobispo? En el momento en que escribo este post, está preso. En la cárcel. La noticia se comenta por sí sola. Estoy convencido de la verdad de sus palabras. Ustedes que pueden, señores políticos, presionen a sus colegas (o lo que sean), hagan algo.