Una reflexión para avanzar en el cuidado de la Casa Común Jesuitas de América Latina llaman a la reflexión sobre Medio ambiente y corrupción

Medio Ambiente y corrupción en América Latina y el Caribe
Medio Ambiente y corrupción en América Latina y el Caribe

“El libro es un testimonio colectivo que documenta la erosión ambiental causada por la corrupción, particularmente en el contexto de los países Latinoamericanos, y nos da algunas luces sobre la necesidad imperante de una respuesta colectiva y radical”

La degradación ambiental es consecuencia del proceso de desarrollo capitalista, que explota al ser humano y la Naturaleza

Muestra la preocupación de contar con un horizonte y orientaciones comunes que faciliten iniciativas para la formación y promoción de sociedades y ciudadanía ética ecológica comprometidas

Un libro que con el título “Medio ambiente y corrupción en América Latina y el Caribe” nos lleva a reflexionar sobre una realidad cada vez más preocupante. Organizado por la Asociación de Universidades confiadas a la Compañía de Jesús en América Latina (AUSJAL), la obra pretende ser, a partir de la pluma de diversos autores, “un faro en la búsqueda de respuestas a los desafíos socioambientales que plantea nuestro tiempo”.

Cuidado de la Casa Común

Consecuencias de la corrupción en el medio ambiente

La obra, con partes en español y otras en portugués, parte de una reflexión en la que se aborda el tema: “Hacia la verdad y la reconciliación con la Casa Común” y “Cooperando para el cuidado de la Casa Común”. A partir de ahí se presentan los “Perfiles de Corrupción y Medio ambiente”, la cuestión del “Estado y Sociedad Civil frente a los desafíos de la cuestión ambiental y de la corrupción”, la “Gobernanza Ambiental y Gobernanza Climática”, el tema del “Cambio climático y la relación Norte Sur”, para concluir con “La corrupción en desastres y emergencias socioambientales en América Latina y Caribe”.

“El libro es un testimonio colectivo que documenta la erosión ambiental causada por la corrupción, particularmente en el contexto de los países Latinoamericanos, y nos da algunas luces sobre la necesidad imperante de una respuesta colectiva y radical”, que surge de los aportes de los casi 20 autores que participan de la obra, a partir de la tradición ignaciana, pues “la preocupación por la ecología se ha manifestado a lo largo de la historia de la Compañía”.

Perspectivas y propuestas de futuro

Estamos ante un libro que “no solo ofrece un diagnóstico completo de la problemática de corrupción y degradación ambiental, sino que también proporciona perspectivas y propuestas para abrazar un futuro más esperanzador, más justo y sostenible para todos y todas”, en vista de una acción colectiva, que lleve a la integridad y la armonía con la naturaleza como pilares fundamentales de nuestra existencia. Es por tanto un llamado a la acción, a la formación de líderes más conscientes y comprometidos en la construcción de un mundo más justo y sostenible.

Se denuncia la corrupción como un flagelo que afecta a prácticamente todos los países de América Latina y el Caribe, lo que lleva a una debilidad institucional que favorece la impunidad y aumenta las desigualdades sociales. Una conclusión que es fruto de un largo proceso colaborativo de análisis y de cooperación entre las redes de la Compañía.

Minería ilegal

Degradación ambiental consecuencia del capitalismo

Se abordan cuestiones relativas a la ilegalidad e ilegitimidad, lo que tiene como causa las deficiencias institucionales, las irregularidades jurídicas y la complicidad de intereses contrarios al bien común. El texto constata que la degradación ambiental es consecuencia del proceso de desarrollo capitalista, que explota al ser humano y la Naturaleza, mostrando los impactos de la corrupción climática en la sociedad, frente a los que se proponen procesos participativos de gobernanza.

Se propone una perspectiva de justicia climática, reconociendo las asimetrías en la emisión de gases entre los países del Norte y del Sur global. Para ello es importante resaltar las propuestas alternativas que lleven al reconocimiento de la deuda ecológica. Ante un momento climático delicado, con un agotamiento de recursos y la proliferación de eventos climáticos extremos que afectan, especialmente a las poblaciones más vulnerables, se pide que el Estado juegue un papel central en el equilibrio de fuerzas y oportunidades. Finalmente, muestra la preocupación de contar con un horizonte y orientaciones comunes que faciliten iniciativas para la formación y promoción de sociedades y ciudadanía ética ecológica comprometidas, planteando orientaciones y pilares a considerar en la reflexión y en la acción.

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