Mons. Oscar Vicente Ojea, en nombre de los obispos argentinos, ha enviado una carta al cardenal Leopoldo Brenes, en la que saluda y manifiesta al arzobispo de Managua la preocupación del episcopado argentino ante la situación de la Iglesia en Nicaragua.

En su escrito, el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, dice conocer “las dificultades en las cuales desempeñan su misión, particularmente la situación que se vive en la Diócesis de Matagalpa”.

Ante esa situación, los obispos argentinos aseguran al Cardenal Brenes su cercanía fraterna y oración, “para que puedan llevar adelante el ministerio pastoral, sin restricciones de ninguna índole”.

Finalmente encomienda al purpurado nicaragüense a la intercesión de la patrona de Argentina, la Madre Santísima de Luján, afirmando que “en su ternura encontramos consuelo y fortaleza”.

La carta del presidente del episcopado argentino sigue la línea de la Iglesia de América Latina y el Caribe, que el pasado 5 de agosto manifestó su apoyo a través del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), actitud que ha sido seguida por la práctica totalidad de las conferencias episcopales del continente en las dos últimas semanas.