Ayudar a obispos, presbíteros, religiosos y laicos para transmitir mensajes positivos y preventivos en situaciones de crisis en la Iglesia, es el objetivo del curso "Media training y estrategias de comunicación en situaciones de crisis", que se ha llevado a cabo esta semana, de 10 a 14 de junio de 2023, en Brasilia, organizado por el Centro de Formación Pastoral (Cebitepal) del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), en colaboración con la Archidiócesis de Brasilia, la Conferencia Nacional de los Obispos de Brasil (CNBB), la Universidad Católica de Brasilia, la Red de Televisión Canção Nova y el Núcleo Lux Mundi, según informa la CNBB a través de su página web.

Cultura del cuidado

Los participantes, llegados de diversas regiones de Brasil, han asistido a lo largo de la semana a conferencias y han recibido asesoramiento individual, estudiando técnicas de media training. Desde el Cebitepal se pretende con este curso, que se está llevando a cabo en diversos encuentros en América Latina y el Caribe, formar a obispos y responsables de departamentos de comunicación del continente en la relación e interacción con los medios de comunicación. Ya fue realizado en el mes de mayo un encuentro en Panamá, con participantes de México, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, Cuba, República Dominicana y Puerto Rico.

Además de enviar mensajes positivos y preventivos en situaciones de crisis, lo primero que debe hacer la Iglesia es crear una "cultura del cuidado y de las buenas prácticas", ha resaltado el padre Fabio Antunes do Nascimento, director del Cebitepal. Para el presbítero brasileño, "la prevención es lo primero" y urge "crear una actitud positiva con los medios de comunicación para responder con claridad y objetividad en casos de crisis".

Ayudar a curar los abusos sexuales

La directora del Núcleo Lux Mundi, Eliane De Carli, colaboró en la formación del encuentro y destacó que la forma en que se abordan estos casos desde el punto de vista de la comunicación puede apoyar el proceso de curación o convertirse en una fuente de daño o revictimización para quienes han sufrido abusos. "El papel de la comunicación en el contexto de la crisis de los abusos sexuales es importante en la medida en que ayuda o dificulta llevar la curación, la justicia y la reconciliación a las personas que han sido dañadas por el delito de abuso sexual cometido en el ámbito eclesial", señaló, citando un trabajo publicado por la Pontificia Comisión para la Tutela de Menores.

En ese sentido, insistió en que "la transparencia y la rendición de cuentas se han convertido en consignas en la reparación de la confianza organizativa y en la gestión de crisis, como antídoto contra el fracaso de las Iglesias a la hora de detener o prevenir los abusos cometidos por el clero. Si entendemos la transparencia y la rendición de cuentas como la provisión de información que sea 'reparadora, fiable, evidencia del cambio organizativo y del carácter de los líderes ejecutivos y organizativos', también debemos entender que nuestra forma de comunicar estas cosas, tanto internamente dentro de la institución como externamente entre el público, debe ser transparente y responsable".