“Unidos con el Papa rezamos por la paz” es el mensaje que millones de personas que viven en las principales capitales del continente, observarán a partir de esta semana en los carteles electrónicos que hacen parte de una campaña que reconoce al Papa Francisco como un abanderado de la paz en el mundo.

Iniciativa en la que trabajan coordinadamente la Pontificia Comisión para América Latina, la Asociación Católica Latinoamericana y Caribeña de Comunicación (SIGNIS ALC) y la Organización de Agencias de Publicidad Latinoamericana (ALOOH).

Los clamores

Una acción que desde la creatividad se une a las celebraciones por los diez años de pontificado del Papa Francisco, destacando su apuesta por la construcción de una cultura de paz que hace parte de los diversos aportes hechos al mundo y a la Iglesia con su magisterio.

"El Papa es un líder por la paz en este momento, un líder respetado y el pueblo busca la paz y reconoce en él a su líder," afirmó Emilce Cuda, secretaria de la Pontificia Comisión para América Latina al explicar que esta campaña nace de la necesidad expresada por los sectores populares, aquellos que no hacen parte de los eventos académicos de las universidades, mucho menos de los que la prensa acostumbra darles voz a través de sus micrófonos.

No obstante, afirma, Emilce Cuda, son los sectores populares los más agradecidos con estos diez años de pontificado del Papa, por lo que en sus palabras era absolutamente necesario darles el espacio para que en este aniversario se expresaran de una manera tan fuerte, como se ha hecho desde diferentes sectores que han tenido la oportunidad de destacar los compromisos del pontífice con los dolores de la humanidad y su forma de transmitir la fe lejos de la retórica o los discursos.

Orar con él

“Pensamos que lo mejor era una campaña en vía publica, porque es ahí donde está la gente, el pueblo está en la calle”, agrega la catedrática destacando el trabajo de SIGNIS y la Organización de Agencias de Publicidad Latinoamericana ALOOH para cumplir los objetivos de la campaña; lo que permitió la creación de los anuncios digitales donde el mensaje es clave; ya no se limita a invitar a la oración por el Papa, sino a orar con él, asumiendo una causa común: el don de la paz.

De acuerdo con Emilce Cuda, las imágenes que hacen parte de la campaña se desarrollaron en todos los idiomas y están siendo replicadas en todas las redes sociales. Sin embargo, lo más importante es que llegarán a todos al hallarse dispuestas en las calles de los más céntricos lugares de las ciudades latinoamericanas.

“Lo más lindo es que se pueden ver en los espacios de vía pública, que es lo que ve la gente, porque son personas que pasan todo el día yendo de un lado al otro para trabajar en varios lugares y no están diez minutos en un bus, sino más de una hora; entonces es muy grato para ellos ver que su cariño hacia el Papa está expresado públicamente,” comentó.

Sencillez y contundencia

A lo largo de su pontificado el Papa Francisco ha aportado de muchas maneras a la construcción de una cultura de paz en el mundo. Sus gestos, palabras, escritos y mensajes, favorecen desde temas como la importancia del diálogo interreligioso y el ecumenismo, hasta la consideración respetuosa por los dolores que viven unos más que otros y que a la final pueden resumirse en el anhelo profundo de paz que habita en el ser humano.

En esta línea, Emilce Cuda recuerda que para el Papa Francisco, la paz es social y solo se consigue solucionando los problemas sociales, “si nosotros no nos ocupamos de las causas de la violencia social y ambiental que genera desequilibrios ecológicos y laborales; que a su vez ponen en marcha a millones de personas que no van hacia ningún lado; sino se solucionan esos problemas, no podremos conseguir la paz,” afirma.

“La paz siempre es una paz social sino, es una paz augusta,” advierte.

Y para favorecer este sentir del mundo el Papa Francisco tiene una gran capacidad para hablar en oraciones cortas, vencer la indiferencia, hacerse cercano, uno más con la gente y construir la paz desde lo más simple, de ahí que las personas se sientan identificadas con cada uno de sus gestos, porque ven reflejados en la sensibilidad de un líder mundial cercano a sus alegrías y dolores, un hombre coherente con lo que predica y por ende comprometido con todos, más allá de las creencias.

Causas que nos unen

La apuesta de Francisco por la paz ha quedado clara en las diversas reuniones y encuentros fraternos con líderes de diversas confesiones. Así, ha demostrado  que existen causas comunes que nos unen y están por encima de las diferencias doctrinales, como lo anota Emilce Cuda, en realidad no hay diferencias entre unos y otros “somos hermanos en la carne,” lo que está más allá de las agendas políticas o religiosas.

La opción de Francisco es el Evangelio comprendiendo que Dios creó un mundo para todos, esa es la opción fundamental, según afirma la secretaria de la Pontificia Comisión para América Latina al mencionar los argumentos para desarrollar esta campaña que al cumplirse diez años de su pontificado, nos demuestra con argumentos porque estamos convencidos de unirnos con él para rezar y hacer posible la paz.