"Hide and Seek" ensombreció la celebración del centenario del Papa Wojtyla La Iglesia polaca pide al Vaticano que investigue la pederastia denunciada en un filme
Los hermanos Sekielski, los autores, levantaron ya ampollas en el seno de la iglesia católica polaca en mayo de 2019, con la difusión de un primer documental
En este segundo filme, los cineastas se centran en los casos de tres hermanos, todos ellos menores y víctimas de abusos sexuales por parte de un mismo sacerdote
Las víctimas de los abusos pasan "meses y meses" denunciando su situación "de puerta en puerta", en busca de alguien que les ayude
Las víctimas de los abusos pasan "meses y meses" denunciando su situación "de puerta en puerta", en busca de alguien que les ayude
| RD/EFE
La Conferencia Episcopal de Polonia ha pedido al Vaticano que investigue las denuncias de pederastia en el seno de la Iglesia visibilizadas en un documental emitido por el canal "YouTube" y centrado en los abusos sexuales a menores por un religioso.
"Como alto representante de la Conferencia Episcopal pido a la Santa Sede que abra un procedimiento investigador sobre esos contenidos", escribió en un comunicado el primado de Polonia, el arzobispo Wojciech Polak, según informaciones del canal de televisión polaco tvn24.
La reacción de la Iglesia católica polaca sigue a la difusión, el sábado, del filme "Hide and Seek", el segundo documental firmado por los hermanos Marek y Tomasz Sekielski, que recibió más de 1,9 millones de visitas a través del canal "YouTube".
El primado polaco advierte de que los casos reflejados en ese documental "vulneran la protección a los menores" observados por la Iglesia, por lo que pide la intervención "motu propio" de la Santa Sede, de acuerdo a los procedimientos establecidos por el Vaticano bajo el papa Francisco.
Los hermanos Sekielski levantaron ya ampollas en el seno de la Iglesia católica polaca en mayo de 2019, con la difusión de un primer documental donde sacaban a la luz lo que sus autores denominaban los "pecados sistemáticos de pederastia" de sus religiosos.
En este segundo filme, los cineastas se centran en los casos de tres hermanos, todos ellos menores y víctimas de los abusos sexuales por parte de un mismo sacerdote. La primera de las cintas, cuyo título se traduciría por "No se lo digas a nadie" y que alcanzó 15 millones de reproducciones, provocó ya una intervención del primado polaco, con efectos sobre la política del país, dominada por el partido ultraconservador Ley y Justicia (PiS), muy vinculado a la jerarquía católica.
El gobierno polaco reaccionó endureciendo por la vía de urgencia las penas contempladas por pederastia con el compromiso de no consentir comportamientos de este tipo en ninguna institución, incluidos los estamentos de la Iglesia.
Por su parte, la Conferencia Episcopal polaca se comprometió a llevar adelante un plan para combatir sistemáticamente estos delitos y pidió no dejar que los pecados "de unos cuantos" eclipsaran el bien de la Iglesia.
En este segunda documental, los hermanos Sekielski se proponen atar los cabos que quedaron sueltos en el primero, según explicaron sus autores en la presentación previa a la difusión de la cinta. Los Sekielski aseguran que no se trata de casos aislados, los que reflejan en su filme, sino de situaciones usuales en la Iglesia, favorecidas por unas estructuras jerárquicas que hasta ahora silenciaron esos abusos.
Los religiosos que cometen esos abusos se sienten "impunes", según los cineastas
"Cualquiera que ve el filme comprueba hasta qué punto las víctimas están solas ante estas situaciones", denuncian los autores del documental, en declaraciones al citado canal. Las víctimas de los abusos pasan "meses y meses" denunciando su situación "de puerta en puerta", en busca de alguien que les ayude, en primer lugar, y que esté dispuesto a ejercer la justicia, en segundo, añaden los Sekielski.
Los religiosos que cometen esos abusos se sienten "impunes", según los cineastas. En el peor de los casos serán trasladados a otra parroquia, pero difícilmente responderán ante la justicia por sus delitos.
Los autores de estos documentales se proponen ahora realizar otras dos cintas, en ese caso centradas en la figura de Juan Pablo II, el papa polaco Karol Wojtyla.