Ahora se trata de poner el virus bajo control en todos los países del mundo lo más rápido posible, dice el experto. Si esto sólo tiene éxito en algunas regiones, el coronavirus tiene tiempo para mutar, es decir, para cambiar genéticamente, y habrá más dificultades para combatirlo.
COVID-19 vaccines must be made available to everyone, regardless of nationality or ability to pay. Sweden is working to secure global access to the vaccines that have been developed. #BuildBackBetter#DriveforDemocracypic.twitter.com/hrtD57xSBO
— Ulrik Tideström 🇸🇪 (@UTidestrom) January 15, 2021
"Y aquí se puede ver y se hace evidente que la desigualdad en nuestro mundo también está mapeada en el tema del acceso a las vacunas. Por eso la vacuna es un bien público global. Por lo tanto, debe haber cuotas para toda la población mundial, para distribuirlas proporcionalmente a las poblaciones respectivas y tener en cuenta los niveles de riesgo y vulnerabilidad".
Spiegel cita a Rüppel diciendo que no se gana nada si como sociedad estamos protegidos por una vacuna, pero esta pierde su efectividad porque el virus muta en otro país y nos retorna de allí.
Como consecuencia de esta constatación, Pirmin Spiegel apoya el llamamiento para que se suspendan temporalmente las patentes de las diversas vacunas para que puedan ser producidas y adquiridas rápidamente. La situación de la pandemia sigue siendo muy tensa en muchos países del sur. Y recuerda la situación en Brasil: "Aquí, nuestras organizaciones asociadas nos informan que más de ocho millones de personas están infectadas y más de 200.000 personas han muerto a causa del coronavirus, en algunos casos en condiciones devastadoras", dice Spiegel. En Manaus, por ejemplo, los hospitales están abarrotados y carecen de equipo de protección. La autoridad sanitaria nacional del país latinoamericano aún no ha aprobado ninguna vacuna.
La situación también es dramática en México, donde más de 134.000 personas han muerto a causa del Covid-19. En total, más de 1,5 millones de personas han sido infectadas. El país, con una población de casi 130 millones de habitantes, la décima más grande del mundo, tiene el cuarto número más alto de muertes por Coronavirus. La pandemia - agregó - exacerba las desigualdades sociales existentes. Hasta el 45 por ciento de la población mexicana de bajos y medianos ingresos antes de la crisis está en riesgo de pobreza y el gobierno sólo está conteniendo la pandemia, informan los socios de Misereor.
"En el espíritu de la hermandad y la solidaridad universales, los más pobres y vulnerables necesitan una atención especial. Y no debemos perder de vista otras crisis graves y crecientes en el Sur, a pesar de la pandemia. El hambre, la falta de acceso a la atención sanitaria, la falta de oportunidades educativas, las consecuencias del cambio climático y la injusticia de género".