En una carta abierta dirigida también a otros líderes religiosos mundiales ¿Una tregua olímpica? 30 premios Nobel piden la implicación del papa Francisco
“¡Alto el fuego! ¡Pongan fin a la pérdida de vidas! ¡Prevengan un desastre nuclear!”, piden los premios Nobel, que exigen la aplicación inmediata a los conflictos abiertos de Ucrania y Gaza y que se aproveche el alto el fuego de la tregua olímpica para el intercambio de todos los prisioneros, la liberación de los rehenes, la devolución de los cuerpos de los muertos y el inicio de negociaciones"
“Las víctimas son personas de entre 30 y 40 años, lo que significa, señalan, que se pierden unos 40 años de esperanza de vida por cada una de ellas. Así, cada 100.000 personas asesinadas, equivale a 4 millones de años no vividos: descubrimientos no realizados, niños no nacidos, huérfanos que sufren”
"Que los miles de millones de personas que verán los Juegos se unan a vosotros para pedir la paz. Que nuestros hijos nos sobrevivan”. Es uno de los mensajes que contiene la carta abierta que una treintena de premios Nobel han enviado al papa Francisco, al patriarca ortodoxo Bartolomé, al Dalai Lama y a varios representantes del islam y el judaísmo para que, en vísperas de los Juegos de la XXXIII Olimpiada, que se llevará a cabo entre el 26 de julio y el 11 de agosto de 2024 en París, lancen un llamamiento mundial a todos los gobiernos a favor de la paz y el fin de la guerra.
"Una guerra sangrienta -el conflicto entre Rusia y Ucrania- está teniendo lugar en el continente europeo por primera vez en décadas. Las consecuencias de este prolongado conflicto, que ha entrado en su tercer año, han reverberado en varios países, provocando un aumento de la hambruna en las naciones africanas, una crisis migratoria en Europa y la liberación de sustancias nocivas procedentes de cada bombardeo en el agua, los alimentos y los suministros de leche que llegan a la población de los seis continentes. Para finales de este año, se espera que el número de muertos y heridos en Europa Central supere el millón, por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial», señalan los premios Nobel.
“Mientras nos matamos unos a otros, las personas también destruimos nuestro planeta. Además, el aumento del gasto en armamento es comparable al gasto necesario para erradicar el hambre en el mundo durante los próximos ochenta años. Piénselo: nadie pasaría hambre ni moriría de agotamiento, y ningún niño se quedaría sin alimento. En cambio, en lugar de sostener la vida, se despilfarran recursos para propagar la muerte”, indica también la misiva, que recuerda además que en la actualidad hay "al menos 55 conflictos de este tipo están actualmente en curso”.
“¡Alto el fuego! ¡Pongan fin a la pérdida de vidas! ¡Prevengan un desastre nuclear!”, piden los premios Nobel, que exigen la aplicación inmediata a los conflictos abiertos de Ucrania y Gaza y que se aproveche el alto el fuego de la tregua olímpica para el intercambio de todos los prisioneros, la liberación de los rehenes, la devolución de los cuerpos de los muertos y el inicio de negociaciones.
¿Quiénes son hoy las víctimas de la guerra?, se preguntan los premios Nobel en la carta que cita Il Mesaggero. “Las víctimas son personas de entre 30 y 40 años, lo que significa, señalan, que se pierden unos 40 años de esperanza de vida por cada una de ellas. Así, cada 100.000 personas asesinadas, equivale a 4 millones de años no vividos: descubrimientos no realizados, niños no nacidos, huérfanos que sufren”. "Debemos actuar. ¡Les imploramos que lo hagan! Les pedimos su ayuda para pedir un alto el fuego y una acción selectiva”, claman los premiados con el prestigioso galardón.
Entre los premios Nobel firmantes de la carta se encuentran Erwin Neher, Sir Peter Ratcliffe, Barry Marshal (Nobel de Medicina), Svetlata Alexievich, Elfriede Jelinek (Nobel de Literatura), Emmanuel Charpentier, Elias James Corey, Alan Heeger, Martin Karplus (Nobel de Química), Maria Resa, Jody Williams, Beatrice Fihn, Tawakkol Karman (Nobel de la Paz), Roger Penrose, Michel Mayor, Andre Geim (Nobel de Física), informa el periódico italiano.