Todo el mundo celebra cada año a un santo muy  conocido y popular. Se trata de San Patricio, misionero del siglo IV y quien introdujo  con determinación la fe cristiana en la isla de Irlanda, aunque antes de él ya había  evidencias del cristianismo en esta zona. Lo que sí que parece muy claro es que fue un  pedagogo muy carismático enseñando a Cristo y su Evangelio a los habitantes de la  que hoy es Irlanda. Tal es así que para explicar el misterio de la Santísima Trinidad lo  hacía mostrando un trébol donde hay una misma raíz y tres hojas separadas. Gracias a  este santo esta planta se convirtió en el símbolo por antonomasia de todo lo irlandés.  Logró formar grandes comunidades cristianas así como un clero bien formado, siempre  respetando las costumbres propias celtas que han llegado hasta hoy. Patricio, conocido  como el Apóstol de Irlanda, falleció hacia el año 461 a los 77 años, edad muy anciana  para aquella época.  

Así, el Día de San Patricio es una festividad católica que se celebra cada 17 de marzo  para conmemorar la muerte de este santo, patrón de toda la isla de Irlanda, incluida  Irlanda del Norte. Desde hace varias décadas esta fiesta se celebra a nivel mundial  debido a la extensa diáspora irlandesa, especialmente en Estados Unidos así como en  otros países europeos como Francia o España. 

Por ello, y por primera vez, la iglesia parroquial de Argandoña, junto al Santuario de  Estibaliz y a escasos 10 kilómetros de Vitoria, acogerá una misa abierta a toda la  comunidad irlandesa asentada en territorio alavés para festejar a este reconocido santo  a nivel mundial. 

Será el domingo 17 de marzo a las 13:00h y estará presidida por su párroco, el sacerdote  claretiano Patxi Otamendi. Además, para un mejor seguimiento y participación en la  Eucaristía, la celebración se desarrollará en 4 idiomas: castellano, euskera, inglés e  irlandés o gaélico. 

Esta parroquia invita de esta manera a toda la comunidad irlandesa así como aquellos  que quieran conocer más esta devoción al santo, a acudir a esta misa para recordar la  memoria del Apóstol de Irlanda.