El 15 de febrero se cumplían 15 años de la muerte de Pablo Dominguez, el sacerdote que inspiró el documental “La Última Cima”. Desde entonces la vida de Juan Manuel Cotelo ha sido un “no parar” y dejar de “meterse en líos” “de cine”.  Su última “locura” lleva por título genérico precisamente las palabras del Papa Francisco en la JMJ de Río: “Hagan Lío”. Va camino de la segunda temporada con el apoyo de todos los que creen en él y en Infinito +1.  Le bastaría con que cada persona que visualiza sus videos aportase 1€ y su labor evangelizadora llegaría hasta la Luna si fuese necesario. 

Por todo esto le he propuesto una sencilla entrevista que comienzo matizando una frase suya.

“Mostremos a todo el mundo la belleza de una Iglesia alegre, sacrificada, fiel y valiente… de la que apenas se habla en los medios …” Juan Manuel Cotelo

Txenti.- Si me permites Juan Manuel un matiz, “de la que los medios generalistas no hablan y solo algunos comunicadores se hacen eco”.

Juan Manuel.- Acepto el matiz, por supuesto. De hecho, deberíamos matizar aún más. Porque hay medios generalistas que sí hablan, de vez en cuando, sobre aspectos positivos de la Iglesia. Pero... la balanza está desequilibrada. Porque dan mucho más peso a lo negativo. No sólo sobre la Iglesia, sino sobre el mundo en general. Hay una gran nube tóxica de pesimismo, quejas, enfados, tristeza... generado por el protagonismo que se da a las malas noticias, frente a las buenas. Esa actitud afecta a todo el panorama informativo, contaminando la mente y el corazón de las personas. Algún rayo de sol se cuela por esa nube tóxica... pero es poco, en proporción con tantas cosas buenas que suceden cada día y de las que poco se habla. Como suele decirse, "hace más ruido un árbol que cae, que cientos de árboles que crecen en un gran bosque".

Tx.- La historia de Infinito + 1 podemos decir que comienza o que se gesta al poner en marcha el documental La última Cima y desde entonces no has parado Juan Manuel.

JM.- Hoy precisamente recordamos el fallecimiento de Pablo Domínguez, sacerdote protagonista de LA ÚLTIMA CIMA. ¡Cuántas maravillas hemos visto desde entonces! ¡Cuánta santidad hemos conocido y dado a conocer! ¡Cuántas historias preciosas de conversiones espirituales profundas, entre los espectadores! Y esto no ha hecho más que empezar. Comenzó hace 2.000 años y sólo terminará el día en que no quede una sola persona en la tierra, que no haya tenido la posibilidad de conocer la belleza y eficacia de Jesucristo, en su propia vida. Por eso no podemos descansar en el anuncio del Evangelio, quienes ya lo hemos experimentado en la práctica, no sólo en teoría.

Tx.- Ya sabemos que la frase no es tuya, pero por qué te llamó la atención el “¡Hagan Lío!”

JM.- Porque resume en dos palabras la mayor urgencia que la Iglesia tiene hoy: que todos los bautizados aceptemos la misión individual de anunciar el Evangelio. Si nos limitamos a conocerlo y vivirlo a puerta cerrada, a boca cerrada... la evangelización se detendrá por completo. De hecho, ha sucedido. Hemos delegado la misión de anunciar el Evangelio a gente especial: al estamento religioso, clerical, eclesiástico. Y nos hemos desentendido los cristianos de a pie. Nos hemos conformado con observar, criticar, comentar... sin compartir la alegría de la fiesta con quienes han sido invitados pero no lo saben. Si los cristianos salimos de la zona de confort, si cada bautizado acepta que es luz y sal del mundo... y que no debemos esconder esa luz ni dejar la sal dentro del salero... entonces veremos la transformación real del mundo, porque Jesús siempre es eficaz, si le dejamos actuar a través de nosotros. No podemos tenerle escondido, como si fuera un amante secreto del que nos avergonzamos. Si es nuestro verdadero amor, todo el mundo ha de saberlo.

Tx.- En Estados Unidos podemos decir que hay una mayor cultura del “crowdfunding”, la cooperación en la financiación, para entendernos. ¿Por qué aquí todavía cuesta sacar adelante proyectos con aportaciones particulares?

JM.- Esa actitud de compromiso es muy positiva en Estados Unidos, Alemania, Austria, Suiza... donde los creyentes de cualquier religión asumen su responsabilidad en el sostenimiento económico de las iniciativas de evangelización. Y por eso salen adelante. En España y en Latinoamérica también está cambiando la mentalidad, poco a poco, y lo hemos visto en estos años. Hemos pasado de producir una película gracias a 10 personas que pusieron todo el dinero (LA ÚLTIMA CIMA) a recibir donaciones de 3.000 personas, para que podamos producir la primera temporada de la serie HAGAN LÍO. Aún son pocas personas, si lo comparamos con el número de espectadores, que son millones. Pero es esperanzador ver que cada día hay más personas que se suman, con generosidad e iniciativa. Pasan de espectadores de la fe, a protagonistas. Pasan de pensar "yo no puedo hacer nada salvo mirar", a "puedo hacer algo pequeño y lo hago." Si cada uno hiciera solamente algo pequeño... si pasáramos todos de la "nada" al "algo"... las posibilidades de la evangelización se multiplicarían enormemente.

T.- ¿Cómo fue el fichaje de Carlota Valenzuela?

JM.- Muy sencillo y muy rápido. Le llamé, le anuncié que quería meterla en un lío y me dijo sin pensar: "¡cuenta conmigo!". Luego se lo conté... se lo pensó... y volvió a concluir "¡cuenta conmigo!" Es una alegría tenerla en el equipo de INFINITO + 1.

Tx.-Cuál sería el resumen de la experiencia de la primera temporada de Hagan Lío

JM.- La palabra que mejor resume todo es GRACIAS. Gracias a Dios por el don de la Iglesia. Gracias por derramar abundantes regalos a través de pobres pecadores que le aman. Gracias a cada persona que se abrió a los dones del Cielo y los compartió. Gracias a cada donante que hace posible este precioso trabajo de evangelización a través del lenguaje audiovisual. Gracias por vuestro acto de fe y de amor. Gracias, y que no pare la fiesta.

Tx.- Vamos con el proyecto de la segunda temporada, En qué líos pensais meteros Carlota y tú.

JM.- Carlota y yo no podríamos dar ni un paso, si no fuera por este gran equipo de donantes que sostienen la serie con su dinero y con sus oraciones. Carlota y yo somos la cara visible de HAGAN LÍO, pero hay miles de rostros anónimos, ocultos, que aportan el dinero necesario, sumando pequeñas aportaciones. Cada donante es tan protagonista como nosotros. Y juntos, en equipo, vamos a meternos en las cárceles, en las pateras, en los hospitales, en los lugares de recogimiento en oración, en las zonas más pobres y conflictivas en las que encontramos a apóstoles que viven y anuncian el Evangelio, con sus palabras y sus obras. Vamos a meternos en el corazón de la Iglesia, donde abunda la misericordia. Los espectadores podrán dar gloria a Dios por tanto bien que hace cada día, a través de la Iglesia.

Tx.- Recuérdanos por favor cómo podemos colaborar para que os sigáis metiendo en líos y sobre todo para que nos lo contéis

Muchas gracias por permitírmelo. Quien quiera sumarse a este gran equipo de personas pequeñas, puede hacerlo a través de este enlace: www.haganlio.org  INFINITAS GRACIAS, SIGAMOS UNIDOS