Bosco Films trae la historia de Andrés Kim Nacimiento, la evangelización en Corea y su primer sacerdote llevada al cine

Nacimiento, la evangelización en Corea y su primer sacerdote llevada al cine
Nacimiento, la evangelización en Corea y su primer sacerdote llevada al cine

La evangelización de Corea es un caso singular ya que no fué inicialmente la labor de misioneros que no llegarían hasta 1784 sino la lectura del evangelio en ejemplares introducidos clandestinamente desde China

En 1925 Andrés Kim fue beatificado y en 1984 Juan Pablo II lo canonizó junto a 102 mártires más aprovechando una visita a Corea

Entrevista con el director de la película

De la mano de Bosco films se estrena la película “Nacimiento” la historia del primer sacerdote coreano. Una película que fue estrenada en Corea con motivo del 200 aniversario del nacimiento de Andrés Kim.

Fiel a la biografía la película muestra el proceso de formación de este sacerdote que fue descubriendo poco a poco su vocación y también su camino al martirio.

La evangelización de Corea es un caso singular ya que no fué inicialmente la labor de misioneros que no llegarían hasta 1784 sino la lectura del evangelio en ejemplares introducidos clandestinamente desde China. Dicho de otra manera, los coreanos se evangelizaron a sí mismos y supieron mantener viva la fe a pesar de ser perseguidos, torturados y asesinados. Más de diez mil mártires por la fe. 

Uno de ellos fue Andrés Kim que protagoniza esta película. En 1925 fue beatificado y en 1984 Juan Pablo II lo canonizó junto a 102 mártires más aprovechando una visita a Corea. 

A partir del 14 de febrero en los cines de España “Nacimiento”. 

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Bosco fims ha obtenido una entrevista con el director de la película Park Heung-siK que me permiten compartir en esta información.

¿Cuál fue su motivación para hacer esta película?

Se planificó porque en 2021 se celebró el 200 aniversario del nacimiento del padre Kim Dae-gun, y me pidieron que escribiera y dirigiera la película. Al principio me opuse porque pensé que un santo que vivió tan poco no era adecuado para hacer un largometraje. Sin embargo, al estudiarlo en profundidad, me di cuenta de que el padre Kim Dae-gun no fue sólo un religioso, sino también una figura clave en el inicio de la era moderna de Corea, y me sentí obligado a hacerla porque pensé que su vida y su muerte tienen valores importantes para el futuro que tras la pandemia de la coronavirus.

Corea del Sur es un país con menos católicos que España, ¿cómo fue recibida la película por católicos y no católicos, y cómo les afectó?

Yo no era católico cuando hice la película, así que creo que pude encontrar muchas cosas que los investigadores de la historia del catolicismo en Corea han pasado por alto y retratar la vida del padre Kim Dae-gun tal y como fue en realidad. La película se hizo y se estrenó en plena pandemia de coronavirus. Como la película trata sobre el padre Kim Dae-gun y se estrenó en el Vaticano, puede que le haya salido el tiro por la culata al darse a conocer como un filme excesivamente religioso, pero los no católicos están reconociendo poco a poco su valor como película histórica. Lo insólito de esta película es que no mucha gente la ha visto una vez, pero muchos la han visto muchas veces. El lugar sagrado donde fue martirizado el padre Kim Dae-gun atrae a peregrinos de todo el país, e incluso he celebrado proyecciones y conferencias separadas el día de su martirio. He oído que hubo bastantes personas que volvieron de la apatía o se convirtieron en nuevos creyentes.  

¿Cómo afectó a su propia vida el testimonio del protagonista de la película?

Gracias a esta película, tuve el honor de conocer dos veces al Papa Francisco, a quien admiro desde hace mucho tiempo. Cuando tuvimos el estreno en el Aula del Sínodo del Vaticano, me senté junto al Papa y le saludé en el escenario, y fue muy emocionante pensar que la vida del padre Kim Dae-gun me había llevado hasta aquí. Me bauticé en marzo del año pasado, y mi nombre de bautismo es Francisco. El padre Kim Dae-gun me ha dado valor.

La película puede ser más fácil de entender para el público oriental que para el europeo, pero el público que vea la película en Europa puede tener dificultades para comprender la cultura y las costumbres y seguir la ambientación geográfica o los ritmos, ¿qué antecedentes o explicaciones adicionales daría para ayudar al público europeo a comprender mejor estos aspectos?

Hay una escena en nuestra película en la que Kim Dae-gun mira un mapa y expone los siguientes hechos. En la era de la navegación a vela, España giraba hacia el Oeste para llegar a Manila y Portugal hacia el Este para llegar a Macao, de modo que las dos potencias se encontraban justo arriba y abajo. Pero más al norte estaba bloqueada por China, lo que convertía a Corea en la última tierra inexplorada para Occidente en aquella época. Geográficamente, este hecho es significativo. 

Por otro lado en  Occidente, en el siglo XVI, el catolicismo era objeto de reforma, pero en Corea, que había abrazado el catolicismo para sí desde finales del siglo XVIII, el catolicismo era el evangelio. Esto se debe a que la idea de que todos somos iguales, creados igualmente valiosos por Dios, fue crucial para sacudir el orden gobernante basado en castas, y llevarlo a la era moderna.

En nuestra película hay una escena de las Guerras del Opio. El padre Kim Dae-gun va a bordo del buque de guerra del capitán Cecil en Francia para observar el desarrollo de la Guerra del Opio y el Tratado de Nankín. La Guerra del Opio fue la primera vez en la historia del mundo que Oriente se rindió a Occidente. Al comienzo de la Guerra del Opio, Lin Zixue (Lin Zixi), una destacada figura china, publicó un libro titulado “El libro de los asuntos marítimos” tras una estremecedora derrota ante un barco británico. Era la primera vez que China publicaba un libro que no era suyo, sino de sus vecinos, y la forma en que fue recibido marcó la historia moderna de Corea, China y Japón. En Corea se leyó el libro en 1845 y era demasiado débil para reformarse, y en Japón se leyó el libro más tarde que en Corea, en 1851, pero tanto el shogunato como la facción del emperador lo habían leído, así que cuando el comodoro estadounidense Perry apareció en 1854, inmediatamente arrimaron el hombro y abrieron sus puertos. Corea seguiría negándose a abrir sus puertos y acabaría convirtiéndose en una colonia de Japón. Si el padre Kim Dae-gun no hubiera sido martirizado al principio, la modernización de Corea podría haberse producido antes.

¿A qué dificultades y obstáculos se enfrentó durante el rodaje, ¿cómo los superó y qué tipo de reacción espera del público después de ver la película?

 Al principio de la película, tuve la misteriosa experiencia de que el padre Kim Dae-gun me estaba guiando. Nuestras dificultades no eran nada comparadas con las que debió pasar el padre Kim Dae-gun, así que el equipo de actores trabajó como un solo cuerpo, por lo que no hubo dificultades especiales, salvo el frío. Sólo lamento que, si hubiéramos tenido más presupuesto, nos hubiéramos esforzado más en el arte. Pero lo hicimos lo mejor que pudimos, así que estoy contento con la película.

He estado en España tres veces, y en 2019, una película mía fue invitada al Festival de Cine de Sitges. Estoy muy contento de que la película se estrene en España, un país que me encanta. El año pasado, se instaló una estatua de piedra del padre Kim Dae-gun en el muro exterior de la Basílica de San Pedro del Vaticano. Probablemente sea la primera vez que un asiático lo hace. Espero que el público español conozca el papel del catolicismo en un pequeño país del Extremo Oriente, y que se sienta alentado por la vida y la muerte del padre Kim Dae-gun. ¡Gracias!

Biografía

Andrés Kim Tae-Gon, nació el 21 de agosto de 1821 en Solmoe (Corea). Sus padres eran Ignacio Kim Chejun y Ursula Ko. Era niño cuando la familia se trasladó a Kolbaemasil para huir de las persecuciones. Su padre murió mártir el 26 de septiembre de 1839. También su bisabuelo Pío Kim Chunhu había muerto mártir en el año 1814, después de diez años de prisión. Tenía quince años de edad cuando el padre Maubant lo invitó a ingresar al seminario.

Fue enviado al seminario de Macao. Hacia el año 1843 intentó regresar a Corea con el obispo Ferréol, pero en la frontera fueron rechazados.

Se ordenó diácono en China en el año 1844. Volvió a Corea el 15 de enero de 1845. Por su seguridad sólo saludó unos cuantos catequistas; ni siquiera vio a su madre quien, pobre y sola, tenía que mendigar la comida. En una pequeña embarcación de madera guió, a los misioneros franceses hasta Shangai, a la que arribaron soportando peligrosas tormentas.

En Shangai recibió la ordenación sacerdotal de manos de monseñor Ferréol el 17 de agosto de 1845, convirtiéndose en el primer sacerdote coreano. Hacia fines del mismo mes emprendió el regreso a Corea con el obispo y el padre Daveluy. Llegaron a la Isla Cheju y, en octubre del mismo año, arribaron a Kanggyong donde pudo ver a su madre.

El 5 de junio de 1846 fue arrestado en la isla Yonpyong mientras trataba con los pescadores la forma de llevar a Corea a los misioneros franceses que estaban en China. Inmediatamente fue enviado a la prisión central de Seúl. El rey y algunos de ministros no lo querían condenar por sus vastos conocimientos y dominar varios idiomas. Otros ministros insistieron en que se le aplicara la pena de muerte. Después de tres meses de cárcel fue decapitado en Saenamt´õ el 16 de septiembre de 1846, a la edad de veintiséis años.

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Non solum sed etiam

La historia de Corea parece lejana, siglos XVII y XVIII, y casi un caso extraño. Pues no. Es una historia de lo más actual. En pleno siglo XXI hay zonas del mundo a donde no llegan los sacerdotes, ni los misioneros, ni los religiosos, … 

Sigo desde hace años el “Diario de Misión" de un español obispo en África, monseñor Jesús Ruiz. En su última entrega escribía párrafos como estos: 

“En una hora y pico hemos conseguido llegar a Koulou a 13km de Bossako. Una comunidad de unas doscientas personas nos recibe. Celebramos con fervor la Eucaristía... Al final, dialogamos más de una hora, y es allí que me cuentan que llevan ocho años sin Eucaristía... El último sacerdote que pasó fue el p. Vianney en 2016. Se me cae el alma a los pies, pero esta misma canción la oiré en las siguientes comunidades.”

“Cuando hemos llegado a Karabara nos esperaba toda la población, unos doscientos cincuenta, de los cuales 70 católicos. Aquí no llega nadie de fuera. Los he escuchado contar la historia de su capilla nacida en 1960, cuando los misioneros venían en bicicleta... Recitan

de memoria la lista de los misioneros que han llegado a su localidad..., unos siete, o sea, unas siete Eucaristías en 65 años; pero ahora ningún padre viene desde 2016, me dicen.”

Hoy, año de gracia de 2024, muchos cristianos mantienen su fe “de milagro”, a su manera y “a mucha honra”. 

Estos merecen una película. 

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