Dos familias de larga tradición en el mundo del circo se han dado la mano para un proyecto que presentan bajo la mítica frase de “¿Cómo están ustedes? la saga continúa”.

Rody Aragón es el hilo conductor de un espectáculo que ofrece no solo los tradicionales números del Circo, sino que nos regala un viaje por la historia de su familia que forma parte de la historia de muchas personas. 

La familia Sacristán, propietaria del Circo Holiday ya probó contar con un miembro de la familia Aragón en su espectáculo, Fofito, pero ahora con Rody la propuesta es nueva, diferente: para los de la generación del baby boom es un espectáculo que invita a la nostalgia de ese pasado frente al televisor con el bocadillo de mortadela o el pan y chocolate; para los hijos de esta generación es una oportunidad de acercarse al pasado de sus padres y quizá entender algunas cosas; y para los nietos es la oportunidad de conocer y disfrutar de un espectáculo de ilusión, magia y fantasía, donde los artistas hacen parecer fácil complicados ejercicios y donde el humor sigue siendo apto para todos los públicos.

Si quienes lean estas líneas se encuentran en Vitoria-Gasteiz disfrutando de sus fiestas patronales les invito a acercarse al ferial de Mendizabala y no perderse este espectáculo; y para los demás si el circo Holiday visita sus localidades no se pierdan la oportunidad de contestar una vez más a voz en grito a la pregunta ¿Cómo están ustedes?

El Circo sigue vivo pero necesita de público que lo disfrute.

Non solum sed etiam

Hacía mucho tiempo que no tenía noticias de un buen amigo, y hablando con Justo Sacristán, propietario del Circo Holiday, me dió la noticia de que el pasado mes de noviembre falleció Luis Moreno, un grande del Circo en España, comenzó su carrera como payaso y durante muchos años fue el jefe de pista del Circo Mundial. Vaya mi recuerdo y homenaje en este artículo, aunque sea con meses de retraso a Luis Moreno. 

Luis Moreno fue un famoso “cara blanca”, hijo de Juanito, otro clown de renombre, que hizo muchas galas en Italia junto con su padre y su hermano Juan Carlos en los años 70 y 80, llegando a participar en el Festival Internacional de Circo de Montecarlo en 1976. 

Yo conocí a Luis ya entrado el siglo XXI cuando ya había abandonado su faceta de clown y trabajaba como jefe de pista del Circo Mundial. Al final de su carrera pasó un tiempo en el Circo Holiday donde ejerció también de maestro para los niños del circo. Nunca se olvidó de sus raíces vascas y trabajar por estas tierras era una ilusión para él.