La vida consagrada sigue su ritmo normal Los religiosos de Vitoria eligen a su nueva dirección para los próximos 4 años
Un total de 506 religiosos y religiosas de Vitoria eligieron presidente al claretiano Patxi Otamendi, quien estará acompañado de Sor Begoña Zarco como vicepresidenta y de Pedro Lahora como secretario
| Vicente Luis García Corres (Txenti)
En la fotografías, de izda. a dcha. Pedro Lahora, Arancha Antolínez, Leticia Quintero, Veronica Sorita, Patxi Otamendi, Begoña Zarco y Jesús Ángel Garcia.
No todo son noticias rocambolescas de la vida religiosa en la Diócesis de Vitoria.
Las más de 500 personas que viven en Vitoria-Gasteiz y se dedican a la vida religiosa apostólica han renovado su junta directiva. Organizados bajo el paraguas de la CONFER –Conferencia Española de Religiosos–, estos hombres y mujeres que desempeñan su tarea activa en la capital alavesa, así como en la zona rural forman parte de las 56 comunidades que actualmente nutren la vida religiosa en la Diócesis. En esta elección no participan las 6 comunidades de vida contemplativa del territorio al tener otros estatutos propios y una vida dedicada a la oración en la clausura.
Las más numerosas son las monjas Carmelitas de la Caridad seguidas de las Hijas de San Vicente de Paul. Entre ellas, figuran también las Siervas de Jesús, las Hermanas Reparadoras, las Mercedarias, los hermanos Corazonistas, los Viatores, los Claretianos, Franciscanos, Carmelitas o los Marianistas entre otras comunidades religiosas activas. En total, 506 religiosos y religiosas que han dado su confianza a 7 personas para que sean las que “aglutinen la voz de este colectivo, apoyen a las distintas comunidades en sus diversas necesidades y promuevan la vida consagrada en medio de nuestra sociedad con el constante anuncio del Evangelio”.
Estos 7 elegidos de manera democrática están encabezados por su presidente, que durante los próximos 4 años será el claretiano Patxi Otamendi y que sustituye al hasta ahora presidente José Luis Gerrikagoitia, carmelita descalzo.
Otamendi nació en la localidad guipuzcoana de Beasain, actualmente es el director del Instituto Teológico de Vida Religiosa de Euskal Herria. En la Diócesis de Vitoria atiende pastoralmente las parroquias de Andollu, Aberásturi, Arbulo, Argandoña y Zurbano. Su vicepresidenta es la religiosa Sor Begoña Zarco, monja del comunidad de las Hijas de la Inmaculada Concepción y directora titular del colegio Inmaculada de Abetxuko. La secretaría de CONFER Vitoria recae en Pedro Lahora, clérigo viator y antiguo responsable del área de Catequesis de la Diócesis de Vitoria. Además, les acompañarán un administrador, el hermano corazonista Jesús Ángel García, y como vocales, Sor Leticia Quintero, religiosa de las Cooperadoras de Betania, Sor Verónica Sorita y Sor Arancha Antolínez, ambas religiosas de las Siervas de Jesús.
La mayoría de colegios religiosos de nuestro territorio son de titularidad religiosa por lo que la CONFER de Vitoria tiene además un papel importante en ellos. Esta junta directiva se reunirá de manera periódica para concretar una agenda formativa específica para religiosos y otra general para todos los públicos, incluido escolares para poder adentrarse más en la maduración de su fe o en las diferentes parroquias donde colaboran y que algunas comunidades lideran. Esta elección ha sido comunicada al Obispo de Vitoria, Mons. Juan Carlos Elizalde, quien rubricará con su firma esta nueva junta de los religiosos de vida apostólica que desarrollan su labor en las tierras de Álava, El Condado de Treviño y Orduña.
Non solum sed etiam
La vida religiosa, tanto la activa como la contemplativa, son un sector importante de la Iglesia. Y aunque ocasionalmente sean noticia por acusaciones de pederastia, de abusos, o de cismas varios, lo justo es reconocer que la mayoría de las personas que han hecho esta opción de vida son gente normal, sana, con los mismos problemas que el resto de la humanidad. Pero sobre todo que son personas entregadas en cuerpo y alma al prójimo. Una mayoría desarrolla su labor en el mundo educativo, pero otras hacen su gran labor en el mundo asistencial, en el sanitario, y las obras sociales de la Iglesia o en colaboración con la sociedad civil. Entre ellos encontramos a esos “santos de la puerta de al lado”. Por eso la información de hoy merece ser reconocida también.
Etiquetas