A veces los rayos del sol no abrasan tanto
como las cicatrices que nos ha dejado la vida.
*
No hay flor más bella
de las que salen en primavera
que la que brota radiante
del árbol de la amistad.
*
Una persona sencilla camina sonriente,
feliz, humilde y confiadamente
junto a los demás, es decir,
sobre la palma de la mano
del Misterio diáfano de la Vida.
*
Las experiencias más sublimes,
normalmente nos pasan desapercibidas
bajo la capa de ceniza de lo cotidiano.
*
Si solo escuchamos lo que deseamos oír,
no prestaremos atención a nuevos mensajes,
sorprendentes, inesperados.
*
La experiencia de la ausencia nos invita,
nos urge a reavivar el deseo
de la anhelada presencia o, al menos,
el permanente recuerdo de su fragancia.