Cuando saboreó la dulzura
de la fruta de la confianza,
se le avivó el aroma de la esperanza
en su corazón.
*
Es preciso aprender a vivir el arte de la escucha.
Escuchar significa descentrarse, salir de sí
y abrirse al misterio del otro,
con empatía, emoción y cercanía.
Solo al final llegará la palabra oportuna,
respetuosa, humilde, sincera.
*
Fue aprendiendo, con placer y también con sufrimiento,
a desvivirse con alegría y satisfacción por los demás.
Así fue paladeando el sabor de la ternura
y adentrándose en la vida tan profundamente,
que descifró lleno de gozo el significado de desmorirse.
*
La existencia se vuelve muy diferente si,
en lugar de tener miedo a los demás,
nos esforzamos por vivir con confianza,
tendiendo puentes.
*
Si puedes elegir, no escojas
el camino más corto ni el más largo,
sino el que te fascine y conmueva
por la inefable sencillez de su belleza.
*
Cada día resuena en mi interior el eco
de una insondable intuición:
tu vida y la mía no han tenido un principio
ni acabarán en un punto y final.