VIACRUCIS-2-RESPUESTA A TUS PREGUNAS
VIACRUCIS-2-RESPUESTA A TUS PREGUNAS
6. LA FE AUTÉNTICA
¿Dónde está la auténtica devoción? ¿Está en ritos y en prácticas piadosas?
6ª LA VERÓNICA ENJUGA EL ROSTRO DE JESÚS. La Verónica mostró la fe auténtica de quien sirve con valor al necesitado. El rostro de Dios se encuentra, sí en la piedad, pero más en la caridad con sacrificio que desafía burlas y vence respetos humanos.
¡Superaré el miedo al qué dirán! ¡Tendré valor para confesar la fe "haciendo el ridículo ante los demás!
Señor: fortalece mi fe para expresar mi devoción con la práctica sincera del amor fraterno.
7. LA RECAIDA EN EL PECADO
¿Por qué, a pesar de mis propósitos, vuelvo a caer?
7ª JESÚS CAE POR SEGUNDA VEZ. Siempre con los mismos pecados. Y es que soy débil y no pongo los medios necesarios. Confío más en mi propósito que en la gracia del Señor.
Jesús volvió a levantarse. No me desanimaré en mis recaídas y comenzaré de nuevo cada día como hicieron los santos.
Señor Dios: ayúdame a levantarme sin desanimarme, pero recuérdame la necesidad de ser consecuente en la práctica de los medios para vencer la tentación.
8. CONSUELO EN EL FRACASO
¿De dónde me vendrá el consuelo en mis horas de fracaso y dolor?
8ª JESÚS CONSUELA A LAS MUJERES. Tú siempre estás junto a mí, nunca me fallarás. Me darás tu paz y tu fuerza para seguir adelante.
Acudiré ti en la oración. Y sacaré el consuelo sin pretender la solución inmediata de mis problemas. Y estaré atento para consolar al triste; pensaré más en el dolor ajeno y menos en el mío
Señor: que no me falte tu consuelo en el fracaso y que yo aprenda a consolar a los que están más afligidos y desamparados.
9. SITUACIÓN DESESPERADA
¿Por qué sigo en una situación desesperada?
9ª JESÚS CAE POR TERCERA VEZ. Mis problemas precen no tener solución. Me siento como desesperado. Pero contemplo tu tercera caída y una luz se enciende en mi alma. No me dejaré vecer por los obstáculos por difíciles que parezcan. Diré como San Pablo: ¡todo lo puedo en Aquél que me confortal! Pondré de mi parte lo que debo y puedo. Y esperaré confiado tu ayuda
Señor: te suplico que no me dejes caer en la situación desesperada; que te encuentre en mi fracaso para superar contigo todo obstáculo.
6. LA FE AUTÉNTICA
¿Dónde está la auténtica devoción? ¿Está en ritos y en prácticas piadosas?
6ª LA VERÓNICA ENJUGA EL ROSTRO DE JESÚS. La Verónica mostró la fe auténtica de quien sirve con valor al necesitado. El rostro de Dios se encuentra, sí en la piedad, pero más en la caridad con sacrificio que desafía burlas y vence respetos humanos.
¡Superaré el miedo al qué dirán! ¡Tendré valor para confesar la fe "haciendo el ridículo ante los demás!
Señor: fortalece mi fe para expresar mi devoción con la práctica sincera del amor fraterno.
7. LA RECAIDA EN EL PECADO
¿Por qué, a pesar de mis propósitos, vuelvo a caer?
7ª JESÚS CAE POR SEGUNDA VEZ. Siempre con los mismos pecados. Y es que soy débil y no pongo los medios necesarios. Confío más en mi propósito que en la gracia del Señor.
Jesús volvió a levantarse. No me desanimaré en mis recaídas y comenzaré de nuevo cada día como hicieron los santos.
Señor Dios: ayúdame a levantarme sin desanimarme, pero recuérdame la necesidad de ser consecuente en la práctica de los medios para vencer la tentación.
8. CONSUELO EN EL FRACASO
¿De dónde me vendrá el consuelo en mis horas de fracaso y dolor?
8ª JESÚS CONSUELA A LAS MUJERES. Tú siempre estás junto a mí, nunca me fallarás. Me darás tu paz y tu fuerza para seguir adelante.
Acudiré ti en la oración. Y sacaré el consuelo sin pretender la solución inmediata de mis problemas. Y estaré atento para consolar al triste; pensaré más en el dolor ajeno y menos en el mío
Señor: que no me falte tu consuelo en el fracaso y que yo aprenda a consolar a los que están más afligidos y desamparados.
9. SITUACIÓN DESESPERADA
¿Por qué sigo en una situación desesperada?
9ª JESÚS CAE POR TERCERA VEZ. Mis problemas precen no tener solución. Me siento como desesperado. Pero contemplo tu tercera caída y una luz se enciende en mi alma. No me dejaré vecer por los obstáculos por difíciles que parezcan. Diré como San Pablo: ¡todo lo puedo en Aquél que me confortal! Pondré de mi parte lo que debo y puedo. Y esperaré confiado tu ayuda
Señor: te suplico que no me dejes caer en la situación desesperada; que te encuentre en mi fracaso para superar contigo todo obstáculo.
