Clarificados los conceptos sobre Impresiones, Atardecer-amanecer, y a modo de pórtico obertura viene el tema de las áreas más importantes con sus impresiones más significativas. Del hombre: la verdad aplastada por la mentira; de las relaciones en comunidad: la justicia ”ajusticiada” por la desigualdad. Del creyente: la religiosidad bombardeada por el tsunamis de la indiferencia: Del cristianismo: reducido a un acto social. Y de la Iglesia: sin comunión en sus fieles.
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1ª La verdad “aplastada” por la mentira
El tema del hombre y los valores humanos ocupa el área primera. Y dentro, como tema primero, está el de la verdad-conciencia. Y elegimos como acontecimiento que provoca una impresión fuerte y desagradable, la mentira descarada, y mucho más si es justificada y manifestada en afirmaciones falsas, culpables, o en juicios erróneos sin justificación y no reconocidos.
¿Dónde se producen tales impresiones fuertes? En las relaciones interpersonales de todo tipo, en determinadas lecturas, noticias sensacionales, reportajes sobre catástrofes y en datos económicos del mundo exterior. Quien lee el periódico o escucha la radio o ve la televisión o se divierte con el móvil o pide datos por Internet, puede quedar afectado por las mentiras de las personas, grupos políticos o religiosos que justifican una información falsa alegando que él, ellos, la persona, son inocentes, que “no han dicho nada falso, ni han hecho nada malo, injusto u ofensivo”. Y si los “otros”, los que recibieron la impresión negativa protestan, es debido a “otra” opinión y nada más. Hasta el dictamen de un juez será considerado como una respuesta muy “relativa”. ¿Qué hay detrás de las mentiras justificadas? Está la conciencia de estos protagonistas que reflejan y aplican los criterios de la ética de situación con las manifestaciones fundamentales de subjetivismo y relativismo.
Ampliaremos el tema en un artículo posterior.