Un año más volvemos a celebrar en todo el mundo el “Día internacional para la erradicación de la pobreza”.
Hoy más que nunca es un tema demasiado latente, donde las cifras cada vez son más elevadas. Pero detrás de esas cifras hay personas concretas, familias enteras con un rostro que seguro, todos conocemos. Mil millones de personas padecen hambre en el mundo ¿¿¿¿sabéis lo que es eso??? Y se siguen desperdiciando 1300 millones de toneladas de alimentos en el mundo.
Tenemos todo lo necesario para vivir todos y sin embargo el mundo cada vez se empobrece más mientras crecen las desigualdades con 12 millones de ricos en todo el planeta, aumentando cada día más el abismo de la desigualdad. ¿Qué le está pasando al ser humano? Ha perdido el “norte” o mejor: ha perdido a DIOS y con Él, TODO.
Las múltiples causas de la pobreza es por todos bien conocida: especulaciones con el dinero, con los alimentos, acumulación de riquezas, paraísos fiscales, defraudar y eludir impuestos…
Está claro que la riqueza de unos cuantos lo que hace es empobrecer a la mayoría, robar lo que no te pertenece.
Somos un país muy solidario, eso no cabe duda, pero estamos en la cola de la justicia, ¡¡ya está bien!!! ¿Hasta cuándo vamos a seguir permitiéndolo?...