También se reunirá con familias de refugiados El papa irá a Florencia el 27 de febrero, para reunirse con alcaldes y obispos del Mediterráneo
Esta reunión sigue a la ya realizada en Bari (sur) en febrero de 2020, antes de que estallase la pandemia
Ese mismo día, Francisco se reunirá con familias de refugiados y al final de la jornada, el pontífice celebrará misa en la basílica de la Santa Croce
Cardenal Bassetti: "Empecemos de nuevo, entonces, desde Florencia para conseguir que las orillas del Mediterráneo vuelvan a ser un símbolo de unidad y no una frontera”
Cardenal Bassetti: "Empecemos de nuevo, entonces, desde Florencia para conseguir que las orillas del Mediterráneo vuelvan a ser un símbolo de unidad y no una frontera”
| RD/Efe
El papa Francisco viajará a Florencia, en el centro de Italia, el 27 de febrero próximo para participar en un encuentro con alcaldes y obispos de los países del área del Mediterráneo, informó hoy el Vaticano.
Esta reunión sigue a la ya realizada en Bari (sur) en febrero de 2020, antes de que estallase la pandemia, y en la que por primera vez en la historia se reunieron los obispos del aérea del Mediterráneo y alcaldes de varias ciudades con el objetivo de "derribar los muros que separan a las naciones".
El papa participará en la sesiones que se celebrarán en el Salón del Cinquecento del Palazzo Vecchio, sede del Ayuntamiento de Florencia, donde tendrá una intervención junto con el alcalde de la ciudad, Dario Nardella, y un alcalde de una capital mediterránea.
Ese mismo día, Francisco se reunirá con familias de refugiados y al final de la jornada, el pontífice celebrará misa en la basílica de la Santa Croce.
Se trata de la segunda visita del pontífice a la capital de la Toscana, después de que hace seis años participó en la V Conferencia Nacional de la Conferencia Episcopal italiana (CEI).
El presidente de la CEI, Gualtiero Bassetti, agradeció la presencia de Francisco en el encuentro con alcaldes y obispos de los países del área del Mediterráneo porque "solo tejiendo relaciones fraternales es posible promover el proceso de integración".
"Empecemos de nuevo, entonces, desde Florencia para conseguir que las orillas del Mediterráneo vuelvan a ser un símbolo de unidad y no una frontera”, añadió.
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